El técnico de la Selección de Chile, el argentino Ricardo Gareca, dejó en duda su permanencia en el cargo tras la goleada 4-0 que sufrió el equipo este martes ante Colombia en el premundial sudamericano.
Durante el partido que se disputó en el estadio Metropolitano de Barranquilla el técnico se vio desesperado. Las cámaras de la transmisión de televisión lo enfocaban y él se tocaba la cabeza, hablaba con su asistente técnico, hacía cara de quien no entiende lo que le está pasando: se notaba que por dentro, en su cabeza, había un infierno en sus pensamientos.
La abultada derrota en la capital del Atlántico sepultó a Chile en el fondo de la tabla de posiciones, con apenas 5 puntos en diez fechas, y puso en riesgo las opciones del seleccionado austral de clasificar a la próxima Copa del Mundo.
Preguntado en conferencia de prensa sobre su continuidad en el banquillo de La Roja, el entrenador argentino contestó: “hoy no les puedo dar una respuesta concreta. No estoy acostumbrado a tomar resoluciones en caliente, quiero pensar, quiero enfriarme”.
“A lo mejor la dirigencia también tiene que reflexionar”, agregó Gareca, quien asumió la dirección técnica del equipo chileno en enero del 2024. Los dirigentes chilenos lo llevaron para reemplazar Eduardo Berizzo, quien no tuvo un buen rendimiento.
Su carta de presentación era impecable: logró el milagro con Perú en las eliminatorias del 2018 y los llevó a un Mundial luego de varios años sin que lo lograran. También disputó el repechaje a Qatar 2022 con los incas, pero al final se quedó por fuera tras perder contra Australia en una apretada tanda de penaltis.
Sin embargo, Chile acumula cuatro derrotas consecutivas en el premundial y se encuentra a siete puntos de la séptima casilla, que da cupo a un repechaje.
“En estos momentos por ahí el 80% o el 90% (de la gente) quiere que me vaya de Chile. Pero hay un porcentaje que me guardo para ver si yo puedo revertir esta situación”, soltó el DT.
En su visita a Colombia, los jugadores chilenos fueron ampliamente superados desde los primeros minutos. En la segunda parte, Gareca ensayó cinco cambios, pero dos errores individuales condenaron a La Roja.
El argentino, sin embargo, se abstuvo de culpar a sus futbolistas. “Yo asumo la responsabilidad mayor, no tengo nada que decirle a los muchachos”, declaró.
No obstante, es evidente que el seleccionado chileno es uno de los que más se ha visto en aprietos para tener un buen recambio generacional. Los chilenos, que en la década pasada ganaron dos veces consecutivas la Copa América (2015 y 2016), no logran clasificar a un Mundial desde que lo hicieron para la Copa del Mundo del 2014. Al paso que van, tampoco estarán en Norteamérica 2026.
Desde la prensa chilena se dice que la Federación de ese país ya tendría listo el reemplazo de Gareca. Se especula con que sería Gustavo Álvarez, quien actualmente dirige a la Universidad de Chile, uno de los equipos grandes del país austral. No obstante, no hay nada confirmado.
