El partido entre América de Cali y Junior fue una montaña rusa de emociones. En el primer tiempo el cuadro caleño se impuso con un contundente 3-0. Sin embargo, en la segunda parte el conjunto barranquillero le dio la vuelta al marcador, ganó 4-3 y se quedó con los tres puntos.
Esta victoria fue como un bálsamo para los futbolistas del equipo barranquillero, que recientemente dejó de estar bajo las órdenes del entrenador antioqueño Hernán Darío Gómez y pasó a ser dirigido por Arturo Reyes, ya que venían sumando una seguidilla de partidos con resultados flojos.
Sin embargo, el juego estuvo empañado por la pelea que tuvo el jugador Juan Camilo Portilla, del América, con algunos aficionados del Junior que estaban en la tribuna del máximo escenario del fútbol de la capital del Atlántico.
Al parecer, según se ve en un video que circuló por las redes sociales, Portilla, que estaba en el banco de suplentes, respondió a las provocaciones verbales de los hinchas de la tribuna, omitiendo el consejo que le había dado la Policía nacional.
Después, de acuerdo con la información que se manejó en algunos medios de comunicación, Portilla habría tratado mal a uno de los uniformados, por lo que irrumpió la Ley 1801, artículo 35, numeral 1, del Código Nacional de Policía, en el que se estipula que se contempla como una actitud penalizable faltarle al respeto a la autoridad.
Por eso, al futbolista le iban a poner un comparendo, que según las primeras versiones, rechazó. Sin embargo, las autoridades del Atlántico emitieron un comunicado en el que explicaron que en la noche del jueves el futbolista se acercó a las autoridades del hotel en el que estaban concentrados y aceptó que se le impusiera la penalidad económica por su acto.
Superada esa situación, el América de Cali volvió a la capital del Valle del Cauca, para preparar su partido ante Santa Fe, que se disputará el próximo domingo a las 6:10 p.m. en el estadio Pascual Guerrero.