El entrenador de Nacional se mostró satisfecho por el rendimiento del equipo en el empate 2-2 frente al conjunto cardenal en El Campín.
El empate 2-2 de Atlético Nacional frente a Independiente Santa Fe dejó un sinfín de reflexiones para el cuerpo técnico verdolaga. Durante la rueda de prensa posterior al encuentro, el estratega Javier Gandolfi analizó el desempeño de su equipo y dejó en claro que el conjunto antioqueño mereció más, pero se vio condicionado por factores externos, como el estado del terreno de juego.
Para el entrenador argentino, sus dirigidos mostraron un alto nivel en un partido de exigencia máxima. Sin embargo, la frustración se hizo presente al no poder sostener la ventaja en el marcador. “Creo que el equipo mostró una cara que por ahí se venía pidiendo desde el periodismo y parte de la gente que quiere ver un equipo con este volumen de juego, con esta intensidad, con esta fluidez del juego”, expresó Gandolfi, reconociendo la identidad futbolística que busca implementar en el club antioqueño.
Más allá del empate, el técnico resaltó el dominio de Nacional en varios aspectos del juego. “La verdad es que el resultado me deja con ese sabor amargo, pero hay veces que estos resultados me dejan mucho más contento que una victoria porque hoy el equipo creo que fue superior al rival en muchísimos puntos y por eso me deja tranquilo el empate”, afirmó, transmitiendo confianza en el proceso que lidera.
Uno de los puntos que el entrenador no pasó por alto fue el estado del campo de juego. Si bien reconoció que la pelota corría con normalidad, admitió que hubo momentos en los que la cancha incidió en algunas jugadas determinantes. “Tiene incidencias en algunas situaciones, pero el balón corría bien. Las situaciones que tienen por un penal y error en salida, pero en el segundo tiempo el equipo siguió intentando y arriesgando. La toma de decisiones es en segundos, así que nos faltó más certeza”, explicó.
Desde su llegada al banquillo verdolaga, Gandolfi ha sido enfático en su propuesta futbolística: un equipo que siempre busque el arco rival y que sea fiel a su estilo ofensivo. “Uno juega como entrena. Desde que llegamos hemos encontrado un equipo extraordinario que se entiende día a día. Pongo siempre al que esté mejor y para mí cada partido es una final, así que busco al que mejor está. Así quiero que sigan”, manifestó el entrenador verdolaga, dejando en claro su intención de mantener la competitividad interna en la nómina.
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Uno de los mayores desafíos para el cuerpo técnico de Nacional ha sido la apretada agenda de partidos, que ha impedido tener semanas completas de trabajo. El trajín constante ha sido un obstáculo para profundizar en ciertos aspectos tácticos y físicos, algo que el propio Gandolfi lamentó. “Nos está llevando el día a día y así quiero que siga, tenemos gente de experiencia y que ganó mucho. Por ahí siete partidos en menos de veinte y pico de días es mucho, es mucho. No llegamos y estamos entrenando, mañana (hoy 13 de febrero) llegamos a las 10:00 de la mañana y nos vamos derecho al entrenamiento. Entonces, venimos con esa seguidilla”, explicó.
A pesar de las dificultades, el entrenador se mantiene firme en su convicción de que Nacional seguirá evolucionando y afianzando su identidad futbolística. Con un plantel talentoso y una idea clara, Gandolfi y sus dirigidos continúan su camino en busca de la regularidad y los resultados que los acerquen a los objetivos de la temporada. El empate ante Santa Fe deja lecciones, pero también la certeza de que el proceso avanza por el camino correcto.
