Le dicen el mago. La gente se emociona cada vez que toca el balón porque hace cosas increíbles. Ve espacios que ningún otro futbolista lograría encontrar. Pone unos pases entre líneas que dejan a los defensas rivales atónitos. Patea desde afuera del área y los arqueros no saben que hacer. El antioqueño Juan Fernando Quintero es “un elegido del fútbol”, como él mismo dijo.
Se tiene una confianza absurda para cobrar penaltis. No lo paraliza la presión. Por el contrario, esas situaciones sacan lo mejor de él. Lo demostró en el partido de vuelta de las semifinales de la Copa Sudamericana entre Racing y Corinthians, que se jugó el 31 de octubre en el Cilindro de Avellaneda, estadio de “La Academia”, en suelo argentino.
Tres minutos después le enviaron un balón en profundidad a Quintero, quien lo dominó dentro del área y remató de zurda potente. Gol. El cilindro gritó desaforado. Se cumplió lo que escribió Eduardo Sacheri en el cuento Independiente, mi viejo y yo: “en Avellaneda a los brasileños se le congelan las patas y no logran ganar”.
Ese doblete llevó a que el volante antioqueño fuera vitoreado por todo el mundo. Además, lo condujo a alcanzar un nuevo registro: de acuerdo con el estadígrafo Míster Chip, Juan Fernando se convirtió en el segundo futbolista colombiano que logró marcar un doblete en una semifinal de Copa Sudamericana en toda la historia.
El anterior fue el antioqueño Martín Echavarría, quien lo logró con Atlético Nacional en las semifinales de la edición del 2002, cuando el elenco antioqeño eliminó a su homónimo uruguayo en una serie que terminó 5-3 en favor de los colombianos.
El doblete de Echavarría, quien ahora tiene una venta de carros muy reconocida en un sector del Poblado en Medellín, fueron en el juego que se disputó el seis de noviembre del 2002. Aquella vez, Nacional perdió la final del torneo con San Lorenzo de Argentina. Se espera que esta vez el desenlace de la historia sea diferente y Juan Fernando Quintero logre su segundo título continental (ganó la Libertadores de 2018 con River), el 23 de noviembre ante Cruzeiro de Brasil en Paraguay, cuando se juegue la final de la Sudamericana 2024.
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