El cuadro rojo realiza una excelente campaña fuera del Atanasio, lo que es un buen presagio para el duelo de este domingo.
En una Liga Betplay marcada por la irregularidad y las sorpresas, hay un equipo que ha logrado algo que muchos desean pero pocos consiguen: imponer respeto en terreno ajeno. El Deportivo Independiente Medellín ha sabido cómo enfrentar las adversidades de jugar fuera del Atanasio y hoy, con méritos y números contundentes, se alza como el mejor visitante del campeonato.
De los siete partidos que ha disputado fuera de casa en el actual torneo, el conjunto dirigido por Alejandro Restrepo ha ganado tres (ante Envigado, Millonarios y Santa Fe), ha empatado otros tres (frente a Alianza Petrolera, Equidad y Nacional) y solo ha conocido la derrota una vez, en Barranquilla contra Junior. Pero incluso ese tropiezo tiene matices: más allá del resultado, el rendimiento colectivo del equipo paisa fue destacable, y el traspié se atribuyó a un error puntual del arquero Washington Aguerre, no a una mala presentación general.
Esa solidez como visitante se ha convertido en uno de los pilares del DIM en esta Liga. Lejos del Atanasio Girardot, el Poderoso no solo ha sumado puntos valiosos, sino que también ha impuesto su identidad, mostrando convicción, orden y ambición. En cinco de esos siete juegos marcó al menos un gol, lo que habla también de una propuesta ofensiva que no se retrae ante el contexto adverso.
Alejandro Restrepo ha sido claro: la clave de este rendimiento está en la cohesión del grupo y en la fidelidad a una idea. “Esto es gracias al compromiso de los muchachos y de todo el staff del equipo, que han estado acordes con la idea planteada independientemente de que se juegue de local o afuera”, señaló el estratega. Su trabajo se ha visto reflejado no solo en la tabla, sino en la mentalidad con la que el equipo afronta cada compromiso.
Este domingo a las 4:10 p.m., el reto será ante Fortaleza, una de las revelaciones del torneo que, aunque fuerte en su casa, tendrá al frente a un visitante incómodo, sólido y con la clasificación a los cuadrangulares cerca. El DIM llega a este compromiso con 27 puntos, y una victoria no solo reforzaría su buena campaña, sino que le otorgaría la tranquilidad de llegar anticipadamente a la siguiente fase con los 30 puntos que suelen marcar la clasificación.
En una Liga donde los viajes suelen traducirse en dolores de cabeza para muchos, el Medellín ha hecho de sus visitas una virtud. Su rendimiento lo respalda, su propuesta lo confirma y su técnico lo lidera. El DIM no solo quiere ser el mejor visitante: quiere que cada paso fuera de casa sea un paso firme hacia el título.
¿Fortaleza será una nueva víctima de este Medellín viajero? Este domingo se sabrá, pero los números ya cuentan una historia que en la capital, seguramente, están revisando con atención.
