Cuando se trabaja con disciplina las cosas pronto se dan. Eso le pasó a Mary Blanco, quien es una de las árbitras más destacadas del territorio nacional. En 2022 tuvo un año de ensueño, dirigió certámenes importantes a nivel internacional. Esta boyacense ya participó en torneos Conmebol, Fifa y hasta Uefa. En su recuerdo quedó el grato momento de hacer parte de la terna arbitral de una competencia europea, en la Eurocopa de Inglaterra celebrada en junio de 2022, lo hizo como asistente uno.
“Mi experiencia en la Eurocopa fue increíblemente bella, me sentí honrada de hacer parte de esta gran competición, tuve la oportunidad de compartir con las mejores juezas de la Uefa y estar en el mejor torneo de esta confederación. Aprendí mucho, el nivel de juego es muy alto, rápido y táctico. Tuvimos un gran desempeño arbitral y es una experiencia maravillosa que siempre voy a recordar “, expresó Blanco.
Ella es la única jueza colombiana que ha estado en ese torneo. Además del certamen en el viejo continente, el año anterior, actuó en el Mundial sub-20 Femenino celebrado en Costa Rica, donde fue elegida como una de las más destacadas del certamen.
Mary, en su corta trayectoria, se ha vuelto habitual en eventos como la Copa Libertadores Femenina y Liga Betplay, aunque con poca participación en el rentado local, pero se ha hecho un nombre importante fuera del país, tanto así que fue elegida entre las 88 árbitras que dirigirán en la Copa Mundial Femenina de Australia y Nueva Zelanda, que se realizará este año, entre el 20 de julio y el 20 de agosto, otro logro dentro de su extenso palmarés.
El inicio de su historia
Su carrera en el arbitraje empezó hace 18 años, cuando unos amigos la invitaron a asistir a uno de los colegios arbitrales del país. Desde ese momento se encarretó y se propuso ser una de las mejores árbitras a nivel nacional.
Su inspiración fue Adriana Lucía Correa, una de las pioneras del silbato nacional femenino y que tuvo una brillante carrera a nivel nacional e internacional, impartiendo justicia en Juegos Olímpicos, copas América y otros certámenes de categoría.
Ese fue el espejo para que Blanco se propusiera cosas grandes dentro de esta profesión e inspirara a otras mujeres a realizar este oficio.
Mary es consciente del potencial que tienen cada una de las juezas a nivel nacional.
Ardua preparación
“El arbitraje femenino viene en ascenso, hay juezas muy profesionales, se entrenan físicamente, estudian e interpretan las reglas de juego y toman buenas decisiones en los juegos. Cada día se ven más mujeres en las canchas dirigiendo partidos de hombres y mujeres demostrando que tienen cualidades para llegar muy lejos en el arbitraje”, puntualizó la boyacense.
Para José Borda, analista arbitral, el silbato femenino en Colombia ha venido evolucionando a pasos agigantados, cada vez son más mujeres las que se inician en esta profesión, están llegando en buena cantidad a los colegios de árbitros y la formación en estos está siendo óptima.
Sin embargo, apunta: “La Federación Colombiana debería tener políticas más claras en cuanto al arbitraje femenino y al arbitraje en general, pues realmente es muy poca la ayuda que les da, con una pretemporada antes de cada torneo no es suficiente”.
Además, Borda considera que aunque les falta pulirse más en la preparación físico-atlética, la Comisión de Árbitros debería darles más espacio, en el campo y en el VAR y en competencias de Liga (femenina y masculina), pues debido a su buena labor se han ganado el derecho a que las tengan más en cuenta.
Además de Mary, hay otras mujeres que han realizado una decorosa labor, como Paula Fernández, Jenny Arias y María Victoria Daza.
Óscar Rincón, exjuez colombiano, cree que la labor de la mujer en el arbitraje nacional es indispensable porque le brindan más transparencia a la profesión. Además, sostiene que este es solo el inicio de muchos logros que irá consiguiendo dentro del arbitraje. “El trabajo de los colegios ha sido muy bueno, en 3 o 5 años la cantidad de mujeres dentro del balompié nacional será exponencial.
María Daza, otra de las referentes nacionales
María Victoria Daza es una samaria de 36 años que empezó en el arbitraje desde el 2001, desde ese momento se propuso llegar a la Categoría C, cuando lo consiguió subió el listón, con el anhelo de ser árbitra internacional, lo consiguió desde 2014.
También integró, por primera vez en el país, un cuarteto arbitral netamente femenino en 2021, en un encuentro entre Barranquilla y Atlético Huila por la Primera B. El año anterior fue árbitra en el Mundial Femenino Sub-17 celebrado en India. “Fue una experiencia de mucho aprendizaje, donde te hace ver todo desde otro punto de vista, y lo invita a uno a ser más exigente con uno mismo, a llevar tu preparación al más alto nivel, fue una experiencia maravillosa”, señaló Daza.
Paula Fernández Ome sueña con dirigir en un Mundial
Esta capitalina empezó en 2013, su primer torneo fue la Liga de Fútbol de Bogotá, además participó en ediciones del Pony Fútbol. Gracias a la creación de la Liga Femenina en 2017, Fernández pudo dar el salto a primera división y debutar en un encuentro entre Fortaleza y Cúcuta, desde ese momento ha sido habitual su llamado a impartir justicia en distintos encuentros del fútbol femenino.
En 2022, gracias a sus buenas actuaciones obtuvo la escarapela Fifa y conformó una terna arbitral femenina en un Sudamericano Sub-17.
Como objetivo en su carrera se propone llegar a una Copa Mundial de mayores y unos Juegos Olímpicos. Sin embargo, entiende que todo es un proceso y que paso a paso se le irán dando cada una de esas metas.
El arduo trabajo le dio frutos a Jenny Arias
Jenny Arias empezó a incursionar en el arbitraje en 1998, desde ese entonces dirigió torneos de la Difútbol en todas sus categorías, siempre fue muy estudiosa del reglamento y esto llevó a que se vieran los frutos.
En 2016, después de una ardua capacitación teorico-práctica, obtuvo la escarapela Fifa. Esto marcó un antes y un después en su carrera, pues participó en la Copa Libertadores Femenina y los Juegos Bolivarianos. En 2019 arbitró en la final del fútbol femenino entre el Dim y América de Cali, y en 2022 estuvo en Chile en el Sudamericano Sub-20.
Además, es una de las dos únicas mujeres en el país con capacitación VAR (La otra es María Daza) y ya lo hizo en un partido de Copa Colombia entre Millonarios y Fortaleza en 2022.