Hay parejas que en la historia de la NBA siguen en el recuerdo gracias al entendimiento y talento que exhibían en el campo de juego. Por mencionar algunas, Michael Jordan y Scottie Pippen (Bulls); Magic Johnson y Kareem Abdul-Jabbar (Lakers); John Stockton y Karl Malone (Jazz) o Shaquille O’Neal y Kobe Bryant (Lakers).
Ahora, a un día para que se inicie una nueva final del máximo certamen de baloncesto del mundo, otras duplas, que integran el relevo generacional de esta competición, buscarán, respaldadas por sus compañeros de equipo, el anhelado anillo y así quedar inscritos en la lista de campeones del certamen.
Por los Dallas Mavericks sobresalen Luka Dončić, finalista al premio al Jugador Más Valioso en la presente temporada y devorador de récords individuales, y Kyrie Irving.
Mientras que por los Boston Celtics, Jayson Tatum y Jaylen Brown forman una química explosiva que se presenta como el mayor obstáculo hacia el trono de ‘Luka Magic’, como apodan a Doncic.
“Esto es de todo el equipo, no es solamente mío, todavía no puedo creer que estamos en las finales”, detalló Luka, esloveno, de 25 años, quien afronta sus primeras Finales de la NBA al mando de los Dallas, el reto que anhelaba después de seis temporadas maravillando con su magia en el maderamen.
En su primera campaña, Doncic, como lo reseñó la agencia AFP, fue elegido Novato del Año y estuvo cerca del All-Star, una cita que no se ha perdido desde entonces.
También suma cinco presencias en el Mejor Quinteto de temporada, pero la falta de actores de reparto impedía que sus Mavericks llegaran lejos en playoffs, con la única excepción de unas finales de la Conferencia Oeste en 2022. Ahora, además de Irving, cuenta con escuderos de lujo como PJ Washington, Daniel Gafford y Derrick Jones Jr.
Boston, por la gloria
Los Boston Celtics tienen en Tatum y Brown a dos hombres fuertes, veloces y eficaces, además de Al Horford, Derrick White y Jrue Holiday.
Tatum y Brown, quien fue designado el mejor jugador de la eliminatoria, disputan sus segundas Finales como líderes de los Celtics tras caer ante los Golden State Warriors en 2022. Con la experiencia acumulada, buscarán frenar a Doncic y al sediento Dallas, que no se consagra en la NBA desde 2011.