Las selecciones de Colombia lograron los dos títulos en disputa en el certamen realizado en Canadá. Así crece este deporte en Antioquia.
Llevan más de media vida en el agua y no es frase de cajón, o una exageración. Liliana, Celina, Marta, Claudia, y María Fernanda son algunas de las jugadoras de rugby subacuático que ajustan entre 25 y 29 años dedicadas a esta disciplina, y se acaban de coronar campeonas mundiales.
Colombia fue amo y señor de la competencia desarrollada en Canadá, al quedarse con las medallas de oro tanto en mujeres como en hombres, todo un hito para este deporte y para los antioqueños que son la base de ambas selecciones: 25 de los 30 integrantes de los conjuntos son del club Orcas de Medellín.
La mayoría de ellos se iniciaron en la Universidad de Antioquia, en 1997, en el club semillero del rugby subacuático que se convirtió en la base de la Selección Antioquia.
Luego se concentraron en Orcas y en la Selección Colombia, en la que se han ganado un lugar con su talento, dedicación y disciplina.
Y es que este deporte, además de darles alegrías con medallas y logros en las competencias locales, nacionales e internacionales, les ha permitido convertirse en profesionales, esposas, madres y un ejemplo a seguir para las nuevas generaciones que garantizan la continuidad de esta disciplina.
Aparte de medallas, el rugby les ha permitido a jugadoras como Liliana Díaz Osorio vivir todas esas emociones en familia, pues su esposo Jorge Franco y su hermano Camilo Díaz también hacen parte de las selecciones de Colombia y Antioquia, y el club Orcas con el que han recorrido el mundo, proyectando una imagen positiva del país.
Jorge y Camilo –ya se retiró del rugby competitivo– son campeones mundiales y unos enamorados de este deporte, por lo que Liliana se siente privilegiada de vivir con quienes más ama lo que le apasiona.
Tras 26 años dedicada al rugby, ella cumplió su sueño y el de toda la familia. Sus padres y hermano estuvieron atentos por Internet al desarrollo del torneo y de esa final en la que el corazón estaba con ella y con Jorge, que también disputaba el título.
Todo para esta familia fue felicidad porque además del oro de Liliana, también se dio el triunfo de los hombres, de esos compañeros de Camilo que se han convertido en otros hijos para estos amantes del rugby subacuático.
“Ganar esta medalla de oro es algo que soñamos toda la vida y por eso alcanzarla fue como saldar una deuda que teníamos con nosotras mismas. Varias veces habíamos estado cerca, pero solo hasta ahora lo logramos y por eso la felicidad es indescriptible”, comentó Lilo, como le dicen sus amigos.
Las mujeres habían sido en dos ocasiones medallistas de bronce, mientras que los hombres alcanzaron la gloria en 2019 cuando, por primera vez, se coronaron campeones.
Ahora el país celebra con dos nuevas preseas doradas, tras vencer a potencias como Alemania (1-0 en masculino) y Noruega (1-0 en femenino) en el Mundial de Canadá.
Gran progreso
Antioquia, que es base de las selecciones masculinas y femeninas de Colombia, ha tenido un buen desarrollo de este deporte con jugadoras que han llegado al club provenientes de otras disciplinas acuáticas como polo y natación.
Daniel Arias, presidente de la Liga de Actividades Subacuáticas de Antioquia, confirmó que actualmente la región cuenta con más de 500 practicantes de rugby subacuático, que hacen parte de seis clubes.
Además, la creación de las Escuelas Populares del Deporte de rugby les permitió llegar a varias comunas y contar con jóvenes que se apasionaron por esta disciplina y ahora la practican en el alto rendimiento.
Liliana argumenta que esto se da también porque en la región cuentan con mucha competencia, lo que les permite crecer en la cantidad de jugadores y en el nivel.
El próximo reto de los integrantes de la Selección será el Nacional Interclubes que se cumplirá en Bogotá el próximo fin de semana. En noviembre tendrán la cita internacional en la Champions Cup que se disputará en Alemania.
