La discusión entre jugadores de la Selección Uruguaya como Darwin Núñez y Maximiliano Araújo, y algunos hinchas de Colombia en el Bank of America Stadium, Charlotte, Estados Unidos, dejó muchas hipótesis de quién empezó la discusión. En la prensa internacional, se han difundido declaraciones de Ignacio Alonso, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, manifestando que los uruguayos subieron a las graderías para defender a sus familiares, quienes se encontraban en riesgo por actos violentos de los colombianos.
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Esa versión deja mal parada a Colombia y su hinchada. A quienes también algunos uruguayos han acusado de que estaban “borrachos” y que se dejaron llevar por su estado de embriaguez. Sin embargo, en una entrevista con Blu Radio un hincha identificado como Julián Henao, oriundo de Calarcá Qundío, y quien reside en Nueva York, entregó algunos detalles del inicio de esta discusión, dejando la conclusión de que los uruguayos (entre los que se encontraban algunos familiares de jugadores de la selección como la esposa del arquero Sergio Rochet) fueron los que iniciaron la discusión.
“Los colombianos no atacamos borrachos a los uruguayos. Eso es falso y por eso toca grabar este tipo de videos. Minutos antes de que se acabara el partido algunas palabras de hinchas uruguayos comenzaron a calentar a los colombianos, al decir ‘espera a que empatemos para que nos vayamos a penales, ustedes no tienen cobradores’. Había una pareja de personas mayores diciendo este tipo de palabras antes de que se llegara lo último del partido, cuando no todo estaba perdido”, detalló el colombiano.
Julián confesó que algunos colombianos “se dejaron calentar” y comenzaron a responder con insultos y con el cuerpo, es ahí donde entran las manos y los puños como respuesta a los uruguayos. Y también es en ese momento en el que los jugadores de la Selección Uruguaya suben a las graderías a defender a sus familiares.
Sin embargo, Julián enfatizó en que “no podemos quedar como los malos del paseo”, fueron ellos quienes comenzaron la discusión. También aclaró que hubo hinchas uruguayos buenos, que trataron de calmar la tensión del momento, al decir que “siempre debe haber un perdedor y un ganador”.
La versión de los uruguayos
El presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso, se manifestó sobre lo que ocurrió y explicó que los jugadores fueron hasta allí a proteger a sus familiares, luego de que se desatara desafortunadamente una discusión en el lugar donde se encontraban.
“Hasta ahora lo que hemos tenido es diálogo interno, saber que hubo una reacción natural, instintiva, de padre, de esposo, de hermano, de hijo que al ver a su familia en un momento muy complicado y al ver que no permitían la evacuación hacia la cancha, que es lo que el protocolo indica”, dijo Alonso.
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El hombre añadió que: “Estaban rodeados, se trancó el acceso a la cancha y en ese momento quedó muy encerrada la gente que además estaba rodeada de una cantidad impresionante de hinchas colombianos y que algunos, como dijo José María Giménez, tuvieron una actitud agresiva con ellos y se dieron después unas escaramuzas que algunas personas tuvieron que salir a cortar”.
Los jugadores habrían subido a proteger a sus hijos, madres, suegras, señoras, hermanos. “Se agravó la situación, pero creo que es una reacción natural de lo que estaba pasando”.
El jugador José María Giménez aseguró que la selección saltó a las gradas porque sus familiares “corrían peligro”.
“Tuvimos que meternos a la tribuna a sacar a nuestros seres queridos, con un bebé chiquito recién nacido. Un desastre todo. No había ni un solo policía, cayeron a la media hora. Un desastre todo y nosotros ahí dando la cara por los nuestros”, dijo Giménez en declaraciones televisivas tras concluir la semifinal de la Copa América.
Además, agregó que tuvieron un intento de invasión de su palco por parte de hinchas colombianos, quienes tiraron objetos a un lugar donde había niños. “Hay que ver las imágenes, conversar y evaluarlas”, insistió el jugador de la selección Uruguaya.
En medio de las emociones, algunos de los jugadores colombianos intentaron calmar a los del otro equipo. Uno de ellos fue Mateus Uribe, quien intentó calmar a Darwin Núñez, quien después de la discusión, se le vio en la cancha junto a su mujer y sus hijos, con lágrimas en sus ojos por la derrota.
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