En la historia del Tour de Francia, los Alpes han sido el territorio más fructífero para los corredores de Colombia. De 21 etapas ganadas, 15 fueron en esa cadena montañosa situada en Europa Central. Las demás se obtuvieron en los Pirineos (3), Norte (2) y Macizo Central (una). Esta última, en la presente edición, con Daniel Martínez (EF).
Ahora, en la semana decisiva de la actual carrera, con seis etapas aún por encarar, sobre todo la 17 con final en el Col de la Loze, el paso por Alpes podrían convertirse en aliado de Rigoberto Urán (EF) y Miguel Ángel López (Astana), quienes se ubican, en su orden, tercero y cuarto en la clasificación dominada por los eslovenos Primoz Roglic (Jumbo), primero, y Tadej Pogacar (UAE), segundo.
En Rigo, que cede 1.34 con Roglic, y López, a 1.45, se centran las esperanzas del país de otra conquista luego de la alcanzada en 2019 por Egan Bernal (Ineos) que el domingo, en el ascenso a la Grand Colombier, al igual que Nairo Quintana (Arkéa), no lograron seguir el ritmo de sus rivales, perdiendo chance de llegar a París ubicados en el podio.
Centrado y optimista
Urán, de 33 años, es el segundo pedalista más veterano entre los que se mantienen en los primeros lugares de la competencia (ver uno por uno). El otro es el australiano Richie Porte (Trek), de 35.
Con 18 grandes vueltas disputadas, Rigo es mesurado, aunque no conformista. Su experiencia es un arma a favor.
“En carreras de tres semanas hay que estar concentrado hasta el final, quedan dos etapas de montaña duras y una contrarreloj importante. Tenemos que aprovechar las oportunidades”, dice Urán, quien fue segundo en la edición del Tour de 2017, a solo 54 segundos del vencedor Chris Froome (Ineos). Antes de encarar las seis fracciones restantes, Urán estaba a 29 segundos del británico.
El año pasado, a estas alturas de la competencia, el nacido en Urrao era décimo, a 5.33 de Julian Alaphilippe. En la general terminó séptimo, a 5.15 de su compatriota Bernal.
“Hay dos rivales que están muy fuertes y un equipo con un ritmo muy alto, pero vamos a seguir concentrados hasta París”, se ilusiona el paisa.
“No me gusta adelantarme a los acontecimientos”, añade Rigo en referencia a la crono del sábado, que dictará sentencia en la prueba. “Lo más importante es que me encuentro bien y, como suelo decir, hay que estar enfocados hasta el último día. Hay una contrarreloj importante y etapas duras de montaña. Las ambiciones son grandes”, añade.
“Puede pasar de todo”
Miguel Ángel López (Astana) llegó a su primer Tour a disfrutar, a aprender. Sin embargo, sus condiciones lo tienen cerca de un nuevo podio en una grande, después de ser tercero en el Giro de Italia y la Vuelta a España en 2018.
“El Tour está bastante abierto, queda una semana exigente. La lucha por el podio no es solo con Rigo, por detrás vienen corredores como Adam Yates, Richie Porte o Mikel Landa que están progresando”, avisa López.
El boyacense no siente presión y confía en su equipo. “Nos hemos mantenido ahí, escalando posiciones y a falta de una semana estamos en la lucha. La idea es aguantar ahí. Me está encantando el Tour, no lo estoy haciendo mal para ser la primera vez, me siento motivado. Todo va marchando bien. Falta una semana de lucha, puede pasar de todo. Lo importante es tener calma”.
Antes de los 164 km de hoy entre La Tour-du-Pin y Villard-de-Lans, Roglic sigue mirando desde lo alto, pero los rivales no dan nada por perdido.