¿Qué pasa con la mejor versión de Egan Bernal, el último campeón del Tour de Francia? Tras esta pregunta se desprenden muchas más. ¿Por qué no estuvo a la altura de la presente carrera? ... Claro, no siempre se puede tener regularidad en un deporte como el ciclismo, pero, ¿qué falló para que frenara tan pronto sus aspiraciones en la prueba más emblemática del pedal, la cual era su prioridad en el año?
El domingo, en pleno ascenso al Grand Colombier, el cundinamarqués vio cómo sus ilusiones por retener el título se esfumaban al no lograr seguir el fuerte ritmo de sus oponentes; y ayer, en la reanudación tras el día de descanso, sin el frenesí y el ímpetu que tiene acostumbrado, Bernal arribó a meta en el puesto 127, a una diferencia de 27 minutos y 27 segundos frente al ganador de la fracción, el alemán Lennard Kämna (Bora). Inédito balance.
Además, como lo confirmó el entrenador nacional Carlos Mario Jaramillo, Egan no estará, por segundo año seguido, en el Mundial de ruta que tendrá como escenario Imola, Italia, desde el próximo 24 del presente mes.
“El equipo Ineos nos respondió que Egan no estaba en condiciones de ir al Mundial, porque no está andando bien. Tampoco prestaron a Iván Sosa porque va a correr el Giro de Italia”, explica Jaramillo.
En referencia al papel que desempeña actualmente Bernal en el Tour, el orientador prosiguió: “Esta es una temporada anormal para todos, no solo para Egan. El covid-19 nos tuvo en una encrucijada. Varios ciclistas europeos, entre ellos los eslovenos Primoz Roglic y Tadej Pogacar, nos llevan ventaja porque estuvieron corriendo más tiempo. Pienso que no es lo mismo entrenar o hacer pruebas en simulador que competir”.
Millo agrega que con lo que se está viviendo es difícil mantener el nivel. “Mire que todos los días un favorito cede terreno, como le sucedió a Nairo y hasta a los mismos franceses, como Thibaut Pinot y Julian Alaphilippe... En sí la gente no se logró preparar como se debe al no contar con la suficiente planificación, entonces tal como se puede coger rápido la forma, así mismo se puede perder”.
El italiano Gianni Savio, gerente deportivo del equipo Androni, conoce a Egan como la palma de su mano. No en vano él le abrió las puertas al cundinamarqués para que llegara al ciclismo europeo en 2016.
Para Savio es difícil asegurar qué le puede estar sucediendo a su expupilo, pero a manera personal, expresa que verlo en la condición actual no es normal, y que si fuera su director tomaría la decisión de retirarlo inmediatamente del Tour. “Sería un milagro si en estas etapas que restan puede ser protagonista”, dice Gianni.
“Para mí, Egan tiene un gran problema físico, con una posible enfermedad”.
Antes de que comenzara el Tour se prendieron las alarmas por el estado de salud del colombiano que, al acusar dolencias de espalda y rodilla, se vio obligado a retirarse del Critérium del Dauphiné.
“Mi consejo es que abandone el Tour, y hacer, de inmediato, toda una serie de exámenes para conocer a profundidad qué pasa en su organismo”.
En días pasados, desde que se conoció que el criollo sería el jefe de filas del Ineos en el Tour, se habló de una posible división en el seno de ese elenco, que venía siendo la escuadra más poderosa del ciclismo mundial en la última década con 7 tours ganados.
La salida de Chris Froome de manera sorpresiva a partir de la próxima campaña, y que al lado de Geraint Thomas, ambos ganadores de la ronda francesa, no hicieran parte de la presente edición, levantó suspicacias.
“Para saber si hay desunión hay que vivir la situación dentro del Ineos. Lo que sí me atrevo a firmar es que Egan no pasa por una dificultad mental, la cuestión es física”, reitera Savio.
“Lo conozco demasiado bien. Bernal, cuando se encuentra en óptimas condiciones, tiene un equilibrio psicofísico por el cual él no se desmoraliza ni se amarga. Si hay un obstáculo, es capaz de enfrentarlo. Cuando tenía 19 años estuve con él, y contaba con un coeficiente de un atleta de 30 de edad, muy maduro”.
En ese sentido, el italiano manifiesta que no es una cuestión sicológica y que no le pasó factura la presión de ser líder de su equipo.
“Ese rol no le afectó absolutamente en nada, estoy convencido de ello. Es otra cosa. Jamás, como sucedió el domingo, lo había visto con su rostro desencajado, con la boca abierta, con dificultad de respirar, por algo dijo que ese día había sido el más negativo de su carrera deportiva y que sentía haber perdido tres años de su vida”.
En días recientes, Sean Yates, director deportivo y exmiembro del Ineos -antes Sky-, criticó las tácticas de este conjunto en el Tour, y aseveró que había que revisar la calidad del entrenamiento y preparación que tuvo Bernal durante el tiempo de confinamiento en Colombia.
Savio no cree que Bernal se haya demandado con sus entrenos por su natal Cundinamarca, con más de 4.000 metros de desnivel acumulado, y los cuales pasaban de siete horas, situación que el propio corredor calificaba de “apocalipsis”.
“Es juicioso, serio, muy profesional. Este año, por la pandemia, ha sido muy particular. Tal vez esta situación lo afecto más que a otros, pero en un porcentaje mínimo. Repito, debe tener algo en su cuerpo que lo frena, que no lo deja ser el Egan Bernal que conocemos. Tiene una súper organización que lo rodea para averiguarlo, y así empiece su recuperación lo más pronto posible”, concluye Savio.
