Nueve fechas le restan a la Liga Águila-2, y aunque muchos equipos cogen como muletilla la frase de “nos jugamos nueve finales”, en el caso de Envigado y Rionegro aplica perfectamente, pues ambos clubes tendrán que defender su cupo en la A.
Los dos equipos están en deuda en la presente temporada, ya que acumulan un rendimiento general del 48% para las Águilas y 39% en el caso de los naranjas, y de ahí, su saldo en rojo en la tabla.
Los del Oriente antioqueño tienen un desempeño en casa del 66%. De los últimos 9 juegos, 5 serán en el Alberto Grisales ante Once Caldas, Jaguares, Equidad, Cali y Millonarios.
Por fuera acumula un 33% de producción y en lo que resta del torneo tendrá que visitar a Huila, Unión Magdalena, Nacional y Pasto.
“Nuestro objetivo está en lograr la clasificación, mantenernos entre los ocho y buscar la final, eso es lo que quiere el grupo”, dijo Flabio Torres.
Los orientados por Eduardo Lara deben recuperar ese buen arranque que tuvieron, ya que en las primeras cinco fechas sumaron tres victorias, un empate y una derrota, resultados que los ubicaron entre los ocho, honor que perdieron en las tres últimas jornadas con igual número de derrotas para quedar a un punto del descenso directo.
En casa, el cuadro paisa acumula un rendimiento del 50% y como visitante del 26%. Y es ahí donde más debe mejorar, pues en lo que resta del torneo, Envigado debe jugar por fuera ante Santa Fe, Bucaramanga, Huila, Unión Magdalena y Nacional.
En el Polideportivo Sur tendrá que medirse a Once Caldas, Jaguares, Equidad y Cali, con la obligación de sumar para así mantener su cupo en primera categoría.
