La noticia de la cancelación del concierto de Shakira en Medellín, como parte del tour Las mujeres ya no lloran cayó como un “baldado de agua fría” para los miles de fanáticos de la ciudad y muchos viajeros que tenían tiquetes y viajes programados para la capital de la montaña este fin de semana.
EL COLOMBIANO conoció que también lo fue para Shakira quien estaba muy entusiasmada de viajar con toda su gente a Medellín a hacer este concierto, así como lo dijo en el comunicado que envió en redes sociales: “Mis hijos estaba emocionados por conocer Medellín, y yo por reencontrarme con ustedes y compartir todas las sorpresas que les tenía preparadas”.
El origen del problema
Lo primero que hay que aclarar es que Shakira, para esta gira, trabaja con su propio equipo de producción que es el que recibe la tarima armada, de acuerdo a las indicaciones técnicas que se entregan en cada ciudad y es su propio equipo quien luego completa el proceso.
Ese grupo de producción de Shakira no estaba en Medellín, estaba con ella en Barranquilla y no tuvo nada que ver con el montaje de la tarima en el Atanasio Girardot, así como lo dijo Páramo en el comunicado entregado este viernes a las 7:00 de la noche: “Durante el proceso de montaje del show programado para el 24 de febrero, el techo del escenario instalado por la producción local sufrió un daño”.
Por ahora no ha trascendido cuál es la empresa encargada de esa producción local y si habrá alguna consecuencia legal por parte de los organizadores.
¿Por qué Shakira está tan afectada por el hecho?
Sabemos, por el entorno cercano a la artista, que ella se enteró de la situación después del primer concierto en Barranquilla y que el tema le afectó mucho dado que era algo que estaba fuera de su control, al ser una responsabilidad que no era de su propio equipo. Ella y todo su staff en Barranquilla estaban listos para viajar a Medellín tras el concierto de este viernes: “Lamento mucho el inconveniente. Especialmente para quienes han viajado”, escribió en su comunicado e insistió, “está fuera de mis manos y de las de mi equipo de producción”.
Es que entre los planes de Shakira, desde el comienzo de la gira, no ha estado que se cancelen o aplacen conciertos y ya van dos que no ha podido hacer: el primero de Lima, por una situación de salud y el de Medellín, por este problema de montaje.
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Ante la situación en nuestra ciudad, la cantante entendió –con mucha tristeza– que era decisión responsable y de sentido común, como se precisó en comunicado de Páramo: “Esto pone en riesgo la seguridad del artista, su staff y lo más importante, la del público”.
Sobre la reprogramación del concierto, EL COLOMBIANO supo que la fecha más probable sería en el mes de septiembre, pero en esas negociaciones están la empresa organizadora de la gira a nivel internacional, Live Nation y la promotora local, Páramo Presenta. Sabemos también que Shakira está muy pendiente de la situación y de poder darle la noticia de una nueva fecha a sus seguidores en Medellín.
