La Fundación Vibra en Alta, del músico paisa, cumplió un año en su trabajo orientado en la educación.
La Fundación Vibra en Alta agrupó una serie iniciativas sociales que el músico J Balvin adelantaba de manera silenciosa y de cierta manera desarticulada.
Eran acciones que respondía a necesidades muy puntuales, en especial que surgían a raíz de desastres o emergencia naturales, de ahí que el artista planteó la idea de tener una fundación que tuviera una estrategia integral y de más impacto.
Así surgió, justo hace un año, en agosto de 2023, Vibra en Alta, cuyo foco central es la educación.
“Nuestra idea es encontrar las cosas con las que vibran las personas y potencializarlos”, cuenta Gregorio Londoño Villegas, director de Vibra en alta, al explicar que es una organización de segundo nivel, que apoya a otras fundaciones y organizaciones.
Los alcances
En el último año han acompañado nueve programas de distintas fundaciones, con los que han impactado directamente a 800 personas, de las 12.000 a las que le llegan a esa fundación, comenta Londoño Villegas, que reconoce que antes de llegar a Vibra en Alta no tenía relación con el mundo de la música y del reguetón.
“Sabía, obvio, quién era J Balvin, pero desconocía a Jose (nombre real del artista), todo lo que lo mueve y su sensibilidad social”.
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Justamente, J Balvin los acompañó el pasado 10 de agosto en la inauguración de una tarima para artistas emergentes, en la Uva Hullas de Vida, en el barrio San Javier.
Cuenta el director de Vibra en Alta que los contactó “El Nene”, de la agrupación Son Batá, y les habló de la necesidad de adecuar ese espacio para que los nuevos artistas tuvieran un escenario para mostrar sus talentos.
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La Fundación no solo construyó la tarima, sino que la dotó con todos los equipos de producción necesarios para su operación.
Otros apoyos
También trabajan de la mano del Balcón de los artistas, una escuela de danza en Manrique, que funciona hace 32 años, que tiene 120 bailarines competitivos y 400 en la academia. Con ellos trabajan en temas de asesoría y en el desarrollo de nuevas estrategias comerciales para su financiación, tal como la apertura de una sede en el colegio Palermo, en El Poblado, para dar clases de baile a extranjeros y residentes de la zona.
Con La Bellota, una fundación de Presencia Colombo Suiza, apadrinan 60 jóvenes, a la vez que les ayudan a buscar recursos internacionales.
“Es un acompañamiento a largo plazo”, detalla Gregorio Londoño Villegas.
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Con ese énfasis en educación también adelantan proyectos con La Juanfe, donde tienen becadas dos niñas. Esta fundación busca transformar la realidad de la infancia y adolescencia más vulnerable, en especial en madres adolescentes, para que puedan cumplir con su ciclo académico.
Lo mismo sucede con Cosmo Schools, la red de colegios de Comfama que alberga de 700 alumnos en 10 sedes, en los que Vibras en Alta hace acompañamiento individual a 20 muchachos.
También trabajan de la mano de la Secretaría de Cultura en la construcción de un estudio de grabación en el Popular # 1, que debe estar listo en octubre o noviembre, que permitirá que los artistas de esa comuna tengan un espacio para grabar sus producciones.
