La Wonder Woman detiene el ataque con su escudo. Es una luz poderosa, pero ella se sostiene, fuerte, con sus dos manos, escondida atrás. Es una guerrera del pueblo de las amazonas, entrenada para ser una luchadora. Invencible.
Su nombre es Diana y es una princesa que vive con su pueblo en una isla paradisiaca. Una vida sin sobresaltos, hasta que el piloto estadounidense Steve Trevor se estrella justo allí y le cuenta que afuera de su tierra hay una guerra mundial. No vale que su mamá le diga que si se va no vuelva: ella quiere ayudar.
Es el regreso de la Mujer Maravilla, esa superheroína de la que muchos se enamoraron en la serie de televisión de los años 70 que protagonizó Lynda Carter y que conquistó con su short azul y de estrellas. Una guerrera bella. Aunque su historia es más lejana en el tiempo: apareció por primera vez en 1941 hecha un cómic.
El personaje vuelve ahora en una película, la primera vez que está en el cine con actores reales. La protagonista es Gal Gadot, israelí que en 2004 representó a su país en Miss Universo, y que ya se vio en adelanto en Batman vs. Superman en 2016.
El origen es el mismo de la serie de televisión, aunque en esta y en los cómics la historia se desarrolla en la Segunda Guerra Mundial, y en la cinta el escenario es antes, entre 1910 y la primera. Además, si en la pantalla chica perdió su uniforme de guerrera amazónica, en la pantalla grande lo recupera.
Para Lynda Lucía Carter, homónima y cosplayer especializada en Wonder Woman, la película será una forma de darle “un nuevo aire. He leído buenas críticas. Lynda Carter le dio el visto bueno”.
Las maravillas están además en la producción: Patty Jenkins es la primera mujer en dirigir una película de superhéroes con una protagonista femenina.
¿Quién eres?, le pregunta un enemigo a la Mujer Maravilla. Pronto lo descubrirás, dice ella .