Dustin Hoffman, próximo a cumplir 80 años (8 de agosto), presentó en el Festival de Canes en mayo de este año la película The Meyerowitz Stories (New and Selected). En la rueda de prensa, lo trataron de “leyenda”. El actor, inexpresivo, respondió con una frase que hizo reír a la audiencia, “todos los que sean mayores que yo ¿podrían por favor levantarse?” Nadie se paró.
Muchos actores, como Hoffman, Morgan Freeman, Judi Dench y Michael Caine, siguen vigentes en la pantalla a pesar de los años.
Su permanencia se explica porque están en un trabajo que hacen con pasión y por gusto. Para Juan Carlos González, coordinador del cineclub de la Universidad Eafit, hay que incluir otro lado más realista, “todos tienen que comer y puede que muchos de ellos no hayan tenido un buen manejo financiero y necesiten seguir trabajando. No todos los actores mayores son protagonistas, muchos está relegados a papeles pocos interesantes. Encuentran con mucha dificultad roles para su edad”.
Este hecho no impide que algunos de estos actores y directores logren estar en buenas películas.
Para Jerónimo Rivera, profesor e investigador de comunicación social de la Universidad de la Sabana, también tiene mucho que ver con esa fama con la que han vivido siempre, “quien ha sido reconocido durante toda su vida se resiste a ser olvidado, una manera de mantenerse es actuar y lo harán hasta que el cuerpo aguante”.
La mayoría de los personajes de esta lista trabajan, así sea en uno o dos proyectos por año, se rehusan a pasar inadvertidos, “en una edad que se puede considerar poco productiva para otras profesiones, un actor está en toda la capacidad. Hay amenazas que los llevan a jubilarse, como el tema de la memoria o la movilidad, pero cuando el actor goza de buena salud no se retira. Es el caso de Clint Eastwood, cada vez es más frenético produciendo, es como una lucha personal contra el tiempo”, precisó Rivera.