Chile continúa invicto en la Copa América de la que es anfitrión y se acercó más al sueño de ser campeón por primera vez. Ayer derrotó por 1-0 a Uruguay que terminó con nueve hombres, en un partido que se decidió cerca del pitazo final.
La Roja logró la victoria gracias a la anotación del lateral Mauricio Isla (80’). El árbitro brasileño Sandro Ricci expulsó por doble amarilla al delantero Édinson Cavani, a los 63 minutos, y cerca del final al defensor Jorge Fucile. Además, sacó del campo al técnico uruguayo Óscar Tabárez tras los reclamos.
La primera parte presentó el libreto que todos preveían: el local tratando de presionar a su rival y Uruguay esperando con dos líneas de cuatro jugadores, lo que hizo que en muchos pasajes se viera un encuentro trabado.
Pese a ello, la primera jugada de peligro la tuvo la celeste a los 2 minutos, en un error entre el arquero Claudio Bravo y su defensa. De ahí en adelante Chile controló el balón. Los dirigidos por Jorge Sampaoli siguieron insistiendo, con un control de balón abrumador, y tuvieron en sus pies varias ocasiones para abrir el marcador, pero les faltó claridad.
La Roja también llegó con jugadas asociadas, pero falló en la puntada final o se encontró con la buena resistencia del portero Muslera.
En el complemento el local siguió presionando y la visita a la defensiva. La expulsión de Cavani por una doble amarilla luego de agredir a Gonzalo Jara reforzó el libreto de los dirigidos por Tabárez: aguantar y tratar de hacer daño con contragolpes. Sampaoli hizo modificaciones para encontrar claridad. Y la consiguió con el gol de Isla para vencer a Uruguay por Copa América desde 1983.