El mundo cambia rápidamente: las marcas de toda clase de productos están en constante búsqueda y evolución para acercarse cada vez más al consumidor actual, que busca más practicidad. Es el caso de BeFit, que surgió como una línea de ropa masculina dentro de Everfit hace algunos años y que hoy se convierte en una marca completamente independiente, que le apuesta a la frescura y la versatilidad. Sin embargo, las prendas seguirán siendo confeccionadas por la misma planta a fin de conservar la calidad característica cultivada durante tantos años.
Primero la comodidad
El comprador de hoy es mucho más ágil, busca simpleza a la hora de vestir, sin dejar de lado el juego que surge del universo de posibilidades que hay actualmente para combinar telas, colores y estilos. Con el ánimo de atender esa necesidad, BeFit investigó y creó sus prendas. “Nuestra esencia es vestir bien a un hombre casual, conservamos los cortes clásicos, los blazers, una prenda que sabemos hacer muy bien y que además es una pieza que transforma completamente un look. Con BeFit vamos más allá, creamos prendas mucho más frescas, con toques de moda que marcan la diferencia”, comenta Lina Arango, gerente de BeFit. Su catálogo incluye pantalones, jeans, camisas, camisetas, corbatas, corbatines, correas y medias; la marca le apunta a la sobriedad pero juega con detalles como colores de la temporada, botones de diferentes tonos y con cintas, hilos en contraste, puños modernos y mini prints.
Prendas fáciles de usar
Las prendas de siempre nunca van a faltar en el armario de un hombre, aquellas que puede combinar sin exagerar y con las que se siente realmente cómodo, sin embargo, hay algunos temores que hacen que el momento de la compra sea complicado y con ello no tomen algunos riesgos que pueden ser positivos, como señala Lina: “A muchos hombres les da dificultad vestirse, se abruman cuando ven diferentes tendencias, prendas extravagantes o colores desconocidos, de hecho se asustan. Lo que queremos con BeFit es ofrecer piezas fáciles de usar, que puedan emplear de diferentes formas, en todo tipo de ocasión y siempre estar muy bien presentados”.
Está bien arriesgarse un poco
Aunque es difícil salir de la zona de comodidad en la que ya se tiene un estilo determinado para el día a día, es importante entender que hay dos tipos de público y que las prendas que se ofrece a cada uno pueden fusionarse y crear atuendos moderados sin dejar de estar a la moda. En BeFit, el comprador encontrará dos líneas: una clásica, en la que priman las prendas básicas, y otra más fashion para un comprador más arriesgado. “Los únicos colores básicos no son el negro y el azul, los grises, los tierra o las rayas, por ejemplo, son otros básicos. Se trata de que vayan perdiendo el miedo a complementar un look”, señala Arango.

Más allá de la compra
Asesorarse siempre será una buena opción: a la hora de comprar vestuario hay expertos que ofrecen una guía en la que a partir del estilo de vida, forma corporal y tono de piel ofrecen sugerencias para que sea mucho menos difícil el reto de comprar moda masculina. Atendiendo esa necesidad, en las seis tiendas BeFit ubicadas en los centros comerciales Viva Envigado, Santafé, Mayorca, San Nicolás; en la 65 y en el punto de fábrica Caribe, hay personal shoppers capacitados por la marca para que entrar al almacén no sea solo un asunto de compra sino una experiencia en la que se adquieren nuevas herramientas.
Además, cuentan con un servicio de sastrería integral: luego de la compra de un traje, es posible ajustarlo a la medida desde la misma planta de fabricación. Otro elemento diferencial es que continuarán con la modalidad que desde Everfit se empleaba: visitar diferentes empresas, llevar el catálogo y un personal shopper para asesorar y dar a conocer los productos y su calidad.
Con estas iniciativas: el cuidado de lo clásico y los complementos de vanguardia, BeFit se empieza a dar a conocer como una marca fresca que exalta el poder de lo simple.