En las últimas semanas, la empresa Thomas Greg & Sons se ha perfilado como la única alternativa para evitar una crisis después del 2 de octubre, cuando vence el actual contrato para la fabricación de pasaportes en el país. O al menos esa fue la percepción que quiso imponerse del asunto, generando un apoyo masivo hacia la compañía.
Paralelamente, el Gobierno buscaba aliados internacionales, reforzando la idea de que al final la única opción era Thomas. La controversia sigue hoy en un punto alto. La Cancillería, faltando pocos días para que el país quede sin fabricante, sigue pescando en río revuelto, con declaraciones que avivan la incertidumbre ante una notable improvisación y posibles favorecimientos.
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En ese contexto, se conoció que desde hace varios meses la empresa colombiana Cadena S.A., ha enviado al menos 10 cartas al Ministerio de Relaciones Exteriores, en las que ponen a disposición su capacidad técnica, económica, y experiencia para participar en el proceso, garantizando continuidad en la prestación del servicio, como inicialmente se creyó que solo Thomas Greg podía hacerlo.
“Como es de su conocimiento, CADENA S.A. cuenta con y más de 43 años de trayectoria en el mercado de impresión de documentos de seguridad y ha manifestado reiteradamente su interés en apoyar al Ministerio de Relaciones Exteriores en el proceso de la referencia, por lo que ha participado activamente desde 2015 en los estudios de mercado y licitaciones abiertas y ha enviado múltiples comunicados con observaciones, alertas, demostraciones de interés, propuestas y solicitudes de aclaración”, se lee en el párrafo inicial de la carta enviada directamente al canciller, Luis Gilberto Murillo, el pasado 23 de agosto.
El nombre de la compañía no es desconocido para la Cancillería. Desde hace varios años, ha sido la única que logra competir con Thomas Greg en las licitaciones, aunque estas siempre terminan siendo adjudicadas a la última.
Curiosamente, cada que participaban veían con sorpresa el endurecimiento de los requisitos en las convocatorias. Con exigencias que, por ser el actual fabricante, solo Thomas podía cumplir. Ello, sin embargo, no fue impedimento para participar.
En el 2019, pese a que exigían la impresión original de los 11 tipos de pasaportes, Cadena los presentó, aunque hubiera significado un gran esfuerzo logístico y económico. Pero para su sorpresa, fueron rechazados, una vez más.
“Se advierte que la presentación de Muestras del Pasaporte Colombiano en plazo tan breve favorecía al contratista tradicional y difería de los estándares internacionales de este tipo de procesos, ya que en muchos países se solicitan muestras genéricas”, hizo constar Cadena dentro del proceso.
Posteriormente, el 15 de mayo de 2023 se abrió una nueva licitación, en idénticas condiciones a las de 2019, sin que, para esa oportunidad, se hubieran considerado las observaciones de terceros interesados.
“Ellos con evidente perjuicio en materia de transparencia, libre y leal competencia e igualdad de oportunidades para todos los participantes”, alegó Cadena.
El pliego de condiciones para la nueva licitación fue objeto de innumerables observaciones y solicitudes de ajuste o modificación, sin embargo, todas ignoradas por la Cancillería.
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Ahora, ante la crisis ampliamente conocida en el país, volvieron a ofrecerse: “Queremos reiterar una vez más la disposición de presentar una alternativa técnica y económicamente viable para el Ministerio”, dicen.
Sostienen que permitir la participación de otro proponente, como ellos, “le permitiría al Ministerio contar con mayor capacidad instalada para atender la actual demanda de documentos de viaje, optimizar los servicios a los ciudadanos y desarrollar una alternativa para la prestación de este servicio esencial para el país”.
Desde 2023, cuando se prorrogó el actual contrato con Thomas Greg, Cadena ha enviado al menos tres cartas a la Cancillería solicitando explicaciones sobre el proceso, sin recibir respuesta hasta la fecha.
“CADENA S.A. cuenta con toda la disponibilidad para avanzar en conjunto con la entidad. Dadas las inversiones y preparación mencionadas, la empresa estaría lista en cuatro meses, teniendo en cuenta que se requiere la importación de insumos que no están disponibles en el mercado colombiano”, dice el último párrafo de la comunicación.
Este nuevo capítulo incrementa la desconfianza sobre el proceso, en el que no hay nada definido con un contrato a pocos días de finalizar.
Coincidencia o no, para este jueves estaba prevista una reunión entre la Cancillería y Thomas Greg en la que prácticamente se confirmaría la continuidad de la empresa en la fabricación de pasaportes; sin embargo, fue aplazada justo cuando se conoció la existencia de Cadena como posible competidor.
