Ricardo Orozco Baeza, alias El Bendecido, aparece en los organigramas de la Fiscalía como la segunda cabeza en la red de contrabando que durante 38 años controló Diego Marín, “Papá Pitufo”, en Colomia.
“El Bendecido” fue capturado el 14 de marzo del año pasado y en su testimonio –mientras Portugal resuelve la deportación de “Papá Pitufo”– podrían estar las llaves que permitan esclarecer la red de sobornos que se extendió para comprar funcionarios de Policía y aduanas y el intento de infiltración de la campaña presidencial del Pacto Histórico en 2022.
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El proceso judicial contra Baeza está suspendido mientras la Corte resuelve un recurso de sus abogados.
Su defensa insiste en que es inocente y que la acusación –de que coordinaba el 80 % del contrabando en Colombia– no tiene fundamento.
“Conozco a mi cliente hace 10 años y nunca había escuchado ese alias de El Bendecido. Resulta que haciendo la verificación es porque él casi siempre saluda a alguien le dice ‘Bendecido, ¿cómo estás?”, señaló William Pinzón, abogado del reo durante las primeras audiencias del caso.
La defensa de Orozco Baeza insistió que solo se trata de un comerciante y que nada tiene que ver con redes delincuenciales.
Las tareas de “El Bendecido” en red de contrabando de “Papá Pitufo”
Pero las pruebas de la Fiscalía indican lo contrario. El hombre, oriundo de Tuluá (Valle) era, aparentemente, el coordinador logístico de “Pitufo” en el puerto de Buenaventura.
Además, entre sus funciones, estaría reclutar funcionarios para sobornarlos y permitir el paso de la mercancía ilegal que provenía de Estados Unidos y Asia y que desembarcaba también en los puertos de Santa Marta y Cartagena.
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De la red se sabe que movía hasta 30 contenedores semanales: cargados de textiles, autopartes, electrodomésticos y licores que generaban ganancias de hasta 8 billones de pesos anuales.
Durante las pesquisas encontraron que la red desembolsaba hasta 902 millones de pesos en sobornos a funcionarios de la Policía y la Dian.
La audiencia de acusación contra “El Bendecido” fue suspendida en septiembre pasado, luego de que sus abogados alegaran que la competencia del caso debía ser asumida por un juzgado de Cartagena y no de Bogotá. La decisión sobre esta competencia será de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia.
En este entramado ya fueron capturados el coronel en retiro Alexander Galeano Ardila y el mayor Mario Andrés Sarmiento, ambos vinculados a la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa).
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