Los cinco hipopótamos que introdujo al país Pablo Escobar hace 42 años y que se multiplicaron hasta ser 169 en este 2023 tienen al Gobierno en una encrucijada entre animalistas, científicos y comunidades ribereñas.
Mientras el Ministerio de Ambiente sigue estudiando qué hacer, el 32% de ellos están en edad reproductiva y en plena capacidad de introducir nuevas crías al ecosistema del Magdalena Medio antioqueño, un territorio “terriblemente afectado por esta especie invasora” que, según las cifras oficiales, podría alcanzar una población de 1.000 especímenes para 2035.
Con una alta probabilidad de morir en traslados y elevados costos para cualquiera de las soluciones que plantean los expertos, la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, aseguró en medio de un debate de control político ante el Congreso que el Gobierno aún contempla aplicarle la eutanasia a una buena cantidad de ellos como parte de la solución para proteger el ecosistema y las demás especies que cohabitan en ese espacio y que se irán extinguiendo con el paso de los años si los hipopótamos no son sacados de ahí.
La única manera de evitar la muerte química, tal como lo explicó Muhamad, es que todos los hipopótamos encuentren cupo en otros lugares del mundo con oferentes que pidan su exportación. Y, ojo, que esas ofertas ya están llegando y cada vez son mejores.
Enviar 60 hipopótamos a la India
Tras la propuesta del Santuario Ostok, ubicado en México, de llevarse a 30 de los “hipos” con todos los costos pagos, el Gobierno de Colombia ha recibido por lo menos otras dos ofertas formales para trasladar a más especímenes.
Una llegó desde la India, donde un solo tenedor pide llevarse 60 hipopótamos, y otra desde Filipinas, desde donde ofertan llevarse 15.
Pero las cosas no son tan fáciles como parecen. Muhamad explicó que el Gobierno colombiano debe asegurarse de que esos traslados no impliquen riesgos para cualquier otra especie o territorio de esos países receptores y que, además, debe supervisar que los traslados se hagan con el máximo rigor técnico y ético.
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“Yo no le voy a trasladar este problema a otros países ni vamos a repetir la historia de Pablo Escobar en pleno 2023. Tenemos que asegurar que quien reciba los hipopótamos es legal y que tiene las condiciones para mantenerlos bien”, aseveró la ministra.
Con eso en mente, parece que el proceso más avanzado es el de la India, pues el Ministerio insinuó que el santuario de México estaba haciendo la solicitud sin dimensionar lo que implica sostener un hipopótamo, por lo que podría ser “hasta irresponsable”.
En India, en cambio, el solicitante se ofreció a pagar una comisión de expertos que visite el sitio donde estarían y revisen si es viable el traslado hasta ese país. “Ojalá se puedan enviar 60 a la India, eso nos solucionaría parte del problema. Por ahora, le apostaremos a la esterilización quirúrgica”, dijo la ministra.
Sobre ese punto, el MinAmbiente también dijo que esa intervención para cada “hipo” cuesta 40 millones de pesos y que ya se firmó un contrato con Cornare para una tanda de 20 esterilizaciones. La meta del Gobierno, según dijo, es avanzar con 40 procedimientos cada semestre hasta intervenir a toda la población que tenga riesgo de reproducirse.
Lo cierto es que, aún con todas esas acciones, MinAmbiente dice que las medidas podrían tardar unos 20 años en controlar la población y surtir efecto y eso, dijo Muhamad, si todos los gobiernos de acá en adelante avanzan en las medidas. “¿Estamos dispuestos a esperar dos décadas?, ¿Nuestros manatíes y nutrias lo aguantarían?, ¿estamos dispuestos a sacrificar todo un ecosistema mientras eso ocurre?”, se preguntó la ministra al tiempo que sugería que la eutanasia era un método necesario.
Hora de tomar decisiones
Con todo ese panorama, el Gobierno de Gustavo Petro se comprometió a presentar y definir este mismo año todo un plan de manejo que incluya las acciones a realizar a corto, mediano y largo plazo con dicha población del Magdalena antioqueño.
En ese punto, por supuesto, será clave la participación de la sociedad ribereña que es la que más convive con los hipopótamos. Tal como se dio a conocer en el debate, decenas de personas no han podido pescar o continuar con sus actividades económicas debido a la presencia de estos mamíferos que, en situaciones de riesgo, pueden llegar a ser altamente violentos contra los humanos.
De hecho, en esa interacción con los humanos dicha población también sufre. En abril de este año, las autoridades reportaron que un hipopótamo murió tras ser chocado por un carro que conducía en la vía Medellín - Bogotá, a la altura de Doradal, y que no pudo esquivar el animal.
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Datos adicionales:
· Los hipopótamos fueron ingresados al país por el narcotraficante Pablo Escobar en 1981.
· Durante estos 42 años, los “hipos” pasaron de ser 5 a completar 169 este 2023. De ese total, 32% está en edad reproductiva, lo que aumenta el riesgo de más crías que incrementen el problema.
· Las esterilizaciones para cada uno de ellos cuestan 40 millones de pesos. El Estado asumirá esos costos y espera realizar 40 procedimientos quirúrgicos por semestre.
· A principios de este año un santuario de México se ofreció a llevarse 30 hipopótamos asumiendo los costos. MinAmbiente aún no se pronuncia.