El presidente Gustavo Petro adelantará un diálogo con las altas cortes para determinar la viabilidad de que la Corte Penal Internacional (CPI) sea la que investigue los crímenes que se cometieron durante el conflicto armado en el país.
“Como jefe del Estado debo decidir si la entrada al país de la Corte Penal Internacional en lugar de profundizar la violencia nos ayude, a través de la verdad, a construir la paz”, detalló Petro en un comunicado.
La intención del mandatario es reducir la impunidad frente a los crímenes de guerra que han quedado archivados u olvidados en los expedientes judiciales.
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El planteamiento del Presidente supone una respuesta a la propuesta del exfiscal general, Eduardo Montealegre. El exjefe del ente acusador señaló que la CPI es “el único camino” que tiene el Estado para destrabar los procesos que quedaron en la impunidad bajo direcciones de Fiscalía de Néstor Humberto Martínez y Francisco Barbosa.
De acuerdo con Montealegre, los fiscales de la CPI se encargarían de juzgar los casos de crímenes de guerra y de lesa humanidad.
Petro, primero, dijo que dialogará con los magistrados de las altas cortes para determinar el “mejor camino para acabar con la impunidad”.
El presidente Petro añadió que ante los esfuerzos de justicia transicional en Colombia –la JEP, por ejemplo– ha aparecido una burla a la verdad y un “intento de destruirla, acotarla, para hundir el país en la impunidad y la violencia”.
La próxima semana arribará al país Karim Khan, fiscal de la CPI. Seguramente, en medio de su arribo, se dialogará la posibilidad que planteó el presidente ese domingo.
