El jefe de Estado se despachó contra aquellos gobernantes que anunciaron que operarán con normalidad este martes. Reclamó que “sirven al dinero y no a su pueblo”.
El presidente Gustavo Petro sigue ambientando a como dé lugar las marchas de este martes en defensa de sus reformas y a favor de la consulta popular. Por ello, este lunes acudió nuevamente a su tribuna favorita, la red social X, para protagonizar una fuerte andanada contra los mandatarios que no están a favor del día cívico decretado para este martes.
El jefe de Estado no se guardó nada contra aquellos alcaldes y gobernadores que han asegurado que laborarán con normalidad este martes y que han reivindicado otros derechos, como la educación de jóvenes y estudiantes. Sin embargo, Petro la emprendió en su contra y no los bajó de “alcaldes de la miseria, el dinero y la muerte”.
En primer lugar, el mandatario respondió a lo dicho por el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, quien advirtió que aquellos maestros que no cumplan su jornada laboral por participar de las manifestaciones podrían ser sujeto de sanciones.
“Aquel que tenga la responsabilidad de ir a cumplir su deber de trabajar con los niños, las niñas y los adolescentes de Bogotá y no cumpla, pues obviamente tendrá una implicación en términos de su pago”, señaló el alcalde capitalino.
Ante ello, Petro sostuvo que la “mejor lección” que se le debe dar a un niño “es la de la dignidad que no tienen los alcaldes, porque sirven al dinero y no a su pueblo”.
“Alcaldes del dinero queriendo amenazar al pueblo. Ningún maestro irá a su clase porque saben que la mejor lección que se le debe dar a un niño, es la de la dignidad que no tienen los alcaldes, porque sirven al dinero y no a su pueblo”, sostuvo el jefe de Estado.
Por otro lado, el primer mandatario se refirió a lo dicho por el alcalde de Montería, Hugo Kerguelén, quien ratificó que la capital de Córdoba “no para, trabaja” en referencia al día cívico decretado por el jefe de Estado.
“Precisamente para trabajar hay que parar. Alcaldes de la miseria que dejan a sus ciudades sin agua. Que prefieren golpear débiles habitantes de calle y vendedores ambulantes que frenar a los voraces especuladores de la tierra y el agua”, reclamó Petro.
En esa línea, insistió en que se trata de “alcaldes de la muerte que no saben defender la vida y que serán borrados de la memoria de los pueblos por las multitudes desatadas”. Por todo ello, ratificó que este martes el que despida a un trabajador “por ir a la marcha del pueblo” será sancionado por “la justicia humana”.
Previamente, Armando Benedetti, ministro del Interior, se despachó en críticas contra los alcaldes y gobernadores que se han opuesto a las marchas y al día cívico que propuso el presidente Gustavo Petro para este 18 de marzo.
La intención del Gobierno es medir el pulso en las calles de los ciudadanos que se oponen al inminente hundimiento de la reforma laboral en el Congreso. El presidente, además de las manifestaciones, anunció la convocatoria a una consulta popular para tratar de hacer contrapeso a las decisiones del Legislativo.
Sin embargo, alcaldes como el de Medellín, Federico Gutiérrez, y el de Bogotá, Carlos Fernando Galán, ya manifestaron que en sus ciudades, sus funcionarios no entrarán a manifestarse en el día cívico y que los servicios de sus administraciones se prestarán con normalidad.
Para Benedetti, el hecho de que algunos mandatarios locales no se sumen al día cívico se interpreta como una preferencia de esos alcaldes por el empresariado y no por los derechos de los trabajadores.
“Están haciendo política de que están con la clase dirigente y con la clase empresarial. Es muy fácil detectar que hay una gran cantidad de personas que le hacen caso es a la Andi (Asociación Nacional de Empresarios de Colombia) y no a las personas que votan por ellos, porque más o menos el 90 % de las personas están trabajando y son de la clase obrera”, señaló Benedetti en entrevista con Noticias Caracol.
“Esa marcha es en apoyo a la consulta. Y la consulta se da porque el Congreso de la República no quiere aprobar lo que tiene que ver con la reforma laboral, que lo que está buscando es que al trabajador se le pague el 100 % de sus domingos y sus festivos”, añadió Benedetti.
