Corría el primer año de la pandemia por el covid-19 y a Colombia llegó Mark Scott Grenon. Acompañado de su hijo, este ciudadano estadounidense habría instalado en el país un peligroso negocio que por varios días puso en peligro la vida de muchas personas, y por el que terminó siendo extraditado junto a alias Falcon este miércoles a Estados Unidos.
Su vínculo con Colombia está relacionado directamente a la cura contra el coronavirus y la pandemia que desde el primer momento que apareció estuvo relacionado a noticias falsas. Una de ellas la aseveración de que el covid-19 provenía de los murciélagos.
En el caso de Scott, para las autoridades él logró ingresar y comercializar en este país una “pócima milagrosa” que servía para tratar el covid-19 y enfermedades que requieren de medicamentos de alto costo como el VIH, hepatitis y la esclerosis múltiple.
Para lograr su cometido, el extraditado y su hijo, Josepth Timothy Grenon, se habrían hecho pasar de guías espirituales de una congregación religiosa de índole mundial, fachada que utilizaron para venderles por internet a sus seguidores la también llamada “solución milagrosa” que de confiable no tenía nada.
Esa actividad les habría causado la muerte a siete personas en Estados Unidos. De hecho, la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por su nombre en inglés) alcanzó a evaluar su caso y sentenció que lo que vendía Mark Scott no tenía efectos medicinales. Pese a eso, llegó a Colombia para negociar.
La sucursal de la congregación la montaron en Santa Marta, ciudad desde la que hacían envíos a sus clientes a diferentes partes del país, a Estados Unidos y hasta algunos países de África.
De la sustancia que comercializaban padre e hijo no se ha detallado un inventario, pero según análisis científicos, estaba compuesta por un blanqueador textil e industrial que es tóxico y que estaría relacionado a la muerte de los siete ciudadanos norteamericanos. La investigación en ese caso siguió su curso en ese país, y es por eso que la Corte de Miami se lo solicitó a las autoridades colombianas para que responda por el delito de falsificación de medicamentos.
Por dicha orden, personal del Gaula y la Fuerza Aérea colombiana viajaron el pasado 10 de agosto de 2020 hasta Santa Marta para capturar a los miembros de la familia Scott, quienes salieron vestidos con trajes azules como si fueran trabajadores de un laboratorio clínico.
Desde entonces compartieron detención en el Pabellón de Extraditables de La Picota, hasta que en diciembre del año pasado, la justicia le dio trámite a la extradición de Joseph Scott y se lo llevaron a su país. Su papá salió con “Falcon” en un avión este miércoles, ocho meses después.