Las Brigadas Solidarias Ganaderas, que instituyó Fedegán para proteger los predios de sus afiliados cuando haya invasiones, están bajo la lupa de la opinión pública desde que el presidente Gustavo Petro las tildó de ser “una invitación al paramilitarismo”. ¿Pero cómo funcionan?
De acuerdo con documentos de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), esta propuesta nació en 2022, cuando en el país se incrementaron las tomas hostiles de campesinos, migrantes extranjeros e indígenas, en contra de varios predios privados, algunos de ellos localizados en Cesar, Huila y Caquetá, y cuyos dueños legítimos empleaban para tareas de ganadería.
Los invasores violaban las cercas e ingresaban a las propiedades portando machetes y palos, en algunos casos, reclamando de esta manera ilegal una porción de tierra dentro del territorio.
Como respuesta nacieron las Brigadas Solidarias Ganaderas, una iniciativa civil, en las cuales el propietario del predio afectado recibe respaldo presencial de otros ganaderos, que conforman patrullas civiles para vigilar los linderos.
Esta acción, que según Fedegán es de carácter pacífico, está complementada con una asesoría jurídica para denunciar los hechos ante las autoridades respectivas.
“Cinco serían las conductas penales en las que incurre la persona o grupos que atenten contra la propiedad privada: usurpación de inmuebles, invasión de tierras, perturbación de la posesión sobre inmueble, avasallamiento de bien inmueble y daño en bien ajeno”, señala la agremiación en uno de sus boletines.
Cuando una situación de estas se presente, Fedegán instruye a sus afiliados a instaurar una querella ante la Policía en un plazo de 48 horas, para lo cual piden documentar pruebas de la invasión (fotos o videos) y tener al menos dos testigos. Después de esto, se pone una denuncia penal ante la Fiscalía.
“No reaccione con agresividad o violencia frente a las personas invasoras”; “no permita que el predio quede solo”; “acuda a la solidaridad ganadera avisando a vecinos y amigos de la región para una efectiva red de apoyo”, son algunas de las recomendaciones que hace el gremio para la operación de las brigadas.
La preocupación de algunos sectores sociales está en que estas brigadas puedan generar algún movimiento de autodefensa, que luego se degenere en una organización violenta, como sucedió en otras épocas, una situación que los ganaderos han negado.
