“La familia Petro llegó a reinar explotando a un pueblo necesitado”. Esa fue la dura frase con la que la excandidata presidencial Ingrid Betancourt inició su crítica a los extravagantes gastos de la primera dama, Verónica Alcocer.
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Tal como se conoció esta semana, los gastos de la esposa del presidente Gustavo Petro para mantener su imagen alcanzan los mil millones de pesos mensuales, un gasto que muchos han considerado excesivo, considerando que la primera dama no es una funcionaria del Estado ni fue electa por voto popular.
En ese mismo sentido, Betancourt aseveró que la familia del jefe de Estado ha “recreado un mundo de privilegios y de corrupción sin precedentes en la historia del país”, una afirmación en la que no se refirió a casos puntuales, pero que sí respondía a un trino criticando a Alcocer.
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En dicho comentario retuiteado por Ingrid, el periodista Luis Carlos Vélez afirmó lo siguiente: “Séquito de la Primera Dama: Maquillador personal y vestuarista, fotógrafo profesional, su mejor amiga y una asesora personal con sueldo de ministro están contratados por tres entidades públicas”.
Eso último, citando la investigación periodística de La Silla Vacía que, justamente, revelaba esos gastos desproporcionados para la imagen de Alcocer.
Así las cosas, esta crítica de Betancourt se suma a múltiples quejas de la excandidata contra el gobierno Petro. En el pasado, por ejemplo, ella misma también ha criticado la paz total del presidente y su relación con Barbosa.
“Pagarle al ELN con presupuesto nacional para que no secuestre, es legalizar el secuestro. A partir de ahí, el negocio es redondo. Esto es tan absurdo e ilegal que sorprende que no metan a Petro a la cárcel por abusar de su mandato presidencial”, trinó ayer.
Sin embargo, las críticas a la primera dama han venido de varios lados de la oposición y hasta de alas petristas, quienes insisten en que Alcocer no debería tener un rol tan protagónico dentro del Gobierno.
Por ahora, la esposa del presidente, Verónica Alcocer, no se ha pronunciado sobre sus elevados gastos.