El Inpec ya había reportado que Óscar Camargo Ríos, conocido como alias Pichi o el “Pablo Escobar de Bucaramanga”, había violado la casa por cárcel en una lujosa residencia de Medellín, razón por la cual le pidieron a la Comisión de Disciplina Judicial investigar a los jueces del caso.
Sobre las 5:00 de la tarde del pasado 10 de octubre, el brazalete de “Pichi” apareció abierto en esa propiedad del conjunto Alcázar de la Serranía, toda vez que se fugó de las autoridades luego de que se le revocara la medida de casa por cárcel.
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El informe del geolocalizador registró los últimos movimientos de Camargo Ríos incluso fuera del departamento de Antioquia, pese a que no podía salir de su vivienda y que tenía vigilancia de los miembros del Inpec, los cuales le hacían visitas constantes para confirmar que estuviera cumpliendo su condena por el delito de concierto para delinquir.
Ese documento detalla que antes de su fuga, el 10 de octubre, el “Pablo Escobar de Bucaramanga” salió de su casa, estuvo en un cementerio y en una plaza pública, tal y como lo registró el movimiento de su georeferenciador, que se situó en al menos cinco puntos diferentes en Medellín.
Luego de salir de su casa en Alcázar de la Serranía, la cual arrendó a una inmobiliaria por $15 millones mensuales, Óscar Camargo ríos recorrió varios puntos de Medellín. El capo del microtráfico de Bucaramanga estuvo en la estación del metrocable Picacho y pasó por inmediaciones al cementerio Campos de Paz.
Luego, llegó hasta la Plaza Botero para recorrer la autopista que lo llevó fuera de Medellín, con rumbo desconocido para las autoridades judiciales. Estos movimientos los habría hecho “Pichi” en una camioneta de alta gama Toyota Prado que tenía en esa propiedad, la cual arrendaron inicialmente para cinco personas, de las cuales no incluía a Camargo Ríos.
La lujosa propiedad de $15 millones mensuales que pagaba “Pichi”
En una lujosa propiedad, ubicada en El Poblado, el “Pablo Escobar de Bucaramanga”, alias Pichi, cumplía la condena en casa por cárcel luego de que fuera beneficiado tras el preacuerdo que avanzó con la Fiscalía General de la Nación.
Era la casa 101 del lujoso condominio Alcázar de la Serranía. La propiedad, que fue arrendada por un valor de $15 millones mensuales, es de 234 metros cuadrados, tiene tres pisos, jardines y hasta jacuzzi. En esa casa estuvo Camargo Ríos hasta la semana pasada.
Según le dijo a El Tiempo la empresa Smarthome, encargada de arrendar la casa 101 del condominio Alcázar de la Serranía, la vivienda fue arrendada a una mujer, desde el 8 de agosto hasta el 8 de noviembre, por $15 millones mensuales. Inicialmente, la arrendadora afirmó que sería ocupada por cinco personas: cuatro adultos y un niño, pero no se adjuntó el nombre de “Pichi” como morador.
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Hace unos días, cuando el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, alertó sobre la supuesta libertad que había recibido “Pichi” para ser designado como gestor de paz por el Gobierno del presidente Gustavo Petro, el abogado Juan De Dios Barrera habló con Vanguardia y aseguró que su defendido, quien “no tendría intenciones de fugarse”, estaba en una casa “modesta” en Medellín. “Está en un apartamento modesto”.
Sin embargo, el ahora prófugo estaba en una lujosa propiedad que puede alcanzar los $1.000 millones si se compra, o los $15 millones si se arrienda, como finalmente lo hizo hasta las 5:00 de la tarde del 10 de octubre, cuando abrió el brazalete y huyó de las autoridades.
Investigación a los jueces con alias Pichi
Al despacho de la presidenta de la Comisión de Disciplina Judicial, Martha Isabel Rueda Prada, llegó una carta del magistrado Alfonso Cajiao Cabrero, en la cual pide que se investiguen a dos funcionarios judiciales por la medida de casa por cárcel de alias Pichi.
El documento que tiene fecha del pasado primero de octubre menciona que a alias Pichi se le otorgó el beneficio de casa por cárcel, pero fue violado en ocho oportunidades.
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“Esta corporación tuvo conocimiento de la noticia publicada por diferentes medios de las presuntas irregularidades cometidas por parte del Juez Segundo Especializado de Bucaramanga, al dejar en libertad a alias ‘Pichi’ quien violó en ocho oportunidades, entre julio y agosto, el beneficio de casa por cárcel del que gozaba por la decisión de la Juez Tercera de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad, por lo que debe procederse de manera inmediata al reparto”, solicitó el magistrado Alfonso Cajiao Cabrera.
A las 5:00 de la tarde del 10 de octubre, luego de conocerse que se había revocado su beneficio de casa por cárcel por transgredir esta medida, Camargo Ríos abrió el brazalete y lo dejó en la propiedad para posteriormente huir como lo hizo en 2018 en Bucaramanga, y dejar sin rastro a las autoridades judiciales que ya lo habían recluido en la cárcel de máxima seguridad de Valledupar, conocida como La Tramacúa.
Su segunda fuga volvió a prender las alarmas de las autoridades toda vez que lo han señalado de controlar el 90 % del microtráfico en Bucaramanga y de ser uno de los principales responsables de la alta tasa de homicidios en el área metropolitana de esa ciudad, donde se disputó el “negocio” con alias Poporro, otrora brazo armado de “Pichi” y quien fue capturado en México portando una identidad falsa.
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Por el momento, miembros del CTI y otros investigadores intentan establecer mediante las cámaras de seguridad del conjunto Alcázar de la Serranía cómo se dio la fuga sin dejar rastro y quienes habrían estado implicados. Según se ha podido determinar, “Pichi” no habría actuado solo para fugarse y esconderse una vez más mientras su abogado defensor estaba próximo a tramitar su libertad.
