Después de que se confirmara que el teniente coronel retirado Hesnard Eduardo Ramírez Rojas sería una de las persona que habría estado detrás de algunos de los mensajes amenazantes que recibió el líder estudiantil Lucas Villa Vázquez y otros integrantes del movimiento estudiantil en Pereira, Risaralda, mientras participaban de las movilizaciones sociales de 2021, la Fiscalía General de la Nación podría llegar a imputarle al exuniformado varios cargos por haber atentado contra la seguridad de los jóvenes.
Cuando Ramírez desempeñaba su cargo en el batallón de Risaralda en ese momento, al parecer, a través de mensajes de WhatsApp y por las redes sociales, se habría referido de manera despectiva a la labor que Villa ejercía, además de haber justificado el ataque contra su vida, del que fue víctima el 5 de mayo de 2021 sobre el viaducto César Gaviria Trujillo, al siguiente día, y que este habría sido difundido desde el celular del señalado.
La investigación de la Fiscalía, además de haber encontrado este tipo de comunicaciones, también reveló que el coronel retirado anticipaba posibles acciones violentas en contra de la comunidad universitaria que coordinaba las marchas y las concentraciones en esa zona del país. Por lo que el ente acusador, concluyó que Ramírez, excomandante del batallón del Ejército, puede ser el responsable de los delitos de amenazas y amenazas contra defensores de derechos humanos.
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“Los elementos de prueba indican que el exoficial hizo una publicación en WhatsApp y redes sociales en la que habría descalificado la labor que ejercía Villa Vásquez y justificado el ataque armado del que fue víctima el 5 de mayo de 2021, en el viaducto César Gaviria Trujillo”, explicó el ente investigador.
Ahora la Fiscalía deberá probar que el militar Ramírez si habría anticipado esas acciones violentas contra la comunidad universitaria en Pereira, así como lo hizo con los mensajes que fueron difundidos por el señalado el 6 de mayo de 2021, mientras Lucas Villa se encontraba en el Hospital Universitario San Jorge de Pereira, bajo diagnostico reservado, hecho que, según indicó la Fiscalía, y con la que concluyó sus hallazgos, “esta acción generó zozobra y miedo, y representó riesgo para la integridad y la vida de los universitarios que un día antes habían sido testigos de la agresión armada en contra de Lucas Villa”.
Es así que no se dictó medida de aseguramiento contra el exteniente coronel Ramírez, quien no aceptó los delitos de los que estaba siendo acusado, por lo que por ahora las investigaciones habrán de continuar con su curso hasta que se esclarezcan los hechos.
