Un fuerte llamado de atención y el compromiso de asistir a un curso del Bienestar Familiar son las sanciones a una familia que dejó abandonada a una menor de 2 años de edad en un taxi en el parqueadero del aeropuerto Ernesto Cortissoz de Soledad que presta el servicio a Barranquilla.
La Teniente de La Policía de Infancia y Adolescencia de la Metropolitana de Barranquilla, Yeimy Paola Vargas, dijo este lunes a Emisora Atlántico, que los padres de la menor le manifestaron que ellos llegaron al aeropuerto a recibir a unos familiares que llegaba procedente de Bogotá.
“La madre nos dijo que ellos llegaron al aeropuerto a recibir a unos familiares que venía de Bogotá. Ella dice que había dejando a la niña con el padre, pero el padre también nos dice que él pensó que la niña había salido del vehículo y entonces empieza la confusión. Lo cierto es que ni el padre ni la madre se habían dado cuenta de que la niña se había quedado dentro del carro”, dijo la oficial.
La teniente Vargas narró que fue una persona, que estaba en el parqueadero, la que se dio cuenta de que la niña se había despertado y estaba sola dentro del carro y entonces llamó a las autoridades.
“El padre de la niña es conductor de taxi y lo había parqueado para ir a recibir a sus familiares. Es otra persona la que se percata de que la niña está sola y llama a las autoridades. No tengo la certeza de si el aire acondicionado del vehículo estaba prendido o no”, precisó.
La oficial agregó que la niña permaneció en el vehículo unos 40 minutos. “Eso es lo que me dicen sus padres. Pero el caso se presentó entre las 9:00 y 9:30 de la mañana. Ellos dicen que pudieron pasar unos 40 minutos”.
Apuntó que la niña permanece bajo custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. “En estos momentos es el ICBF el tiene el caso y de ahora en adelante es esa entidad la dirá qué medidas se tomarán con respecto a los padres de la menor”.
Terminó diciendo que en lo que va del año es el segundo caso que se presenta en Barranquilla y su área metropolitana de niños abandonados por sus padres. “Son los únicos casos conocidos. Hasta el momento no hemos tenido más denuncias”.
