El exmandatario reaccionó a los señalamientos del jefe de Estado, quien lo recriminó por la deuda pública y el déficit del fondo de estabilización de combustibles.
El expresidente Iván Duque respondió este jueves a los señalamientos del presidente Gustavo Petro, quien durante una alocución a propósito de sus dos años de gobierno, lanzó pullas al exmandatario y lo responsabilizó de la situación fiscal que padecía Colombia en 2022.
Durante su intervención, el jefe de Estado reconoció que no han logrado “todo cuanto hubiéramos querido”, entre otras, porque la situación fiscal “que encontramos no fue la más favorable”. De acuerdo con Petro, los dineros que se aprobaron en la primera reforma tributaria de su gobierno “se destinaron para el pago de una deuda pública que adquirió el expresidente y al déficit del fondo de estabilización de combustibles”.
Por ello, destacó que en su gobierno han sido “responsables en el manejo de nuestra economía para mantener el grado de inversión” y que incluso “fuimos el único gobierno que fue capaz de darse la pela de eliminar el subsidio a la gasolina, que beneficia a una muy escasa parte de la población, pero que en los últimos años significó gastos por cerca de $40 billones, casi tres reformas tributarias. Eso también lo dejó Duque”.
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Ante ello, el expresidente reclamó, en primer lugar, que el país lleva dos años escuchando “discursos de retrovisor de mentiras y de excusas”. Por ello, recordó que “hay una realidad” y es que la inversión en el país “va mal”, así como la seguridad y la confianza de quienes invierten en el país.
Frente a los señalamientos de Petro, el exmandatario manifestó que durante su gobierno “han deteriorado por completo” la situación fiscal del país y que en su mandato fue necesario enfrentar una pandemia, “pese a toda la oposición y ataques”. Frente a ello, defendió que se “tenía que responder a las necesidades de todo un pueblo”.
Según Duque, se bajaron los precios de los combustibles para permitir que la economía colombiana saliera adelante y se pudiera abastecer a un país “en una situación precaria”, ante una circunstancia “que solamente se había vivido en el último siglo una sola vez”.
El expresidente defendió que se optó por tomar créditos de la banca internacional “para poder ayudarle al país a salir adelante”, lo que permitió un crecimiento económico de más del 10 % en 2021 y del 8 % en 2022. “No como ese crecimiento mediocre del año pasado, que escasamente estuvo por el orden del 1 % o el que se proyecta para este año”.
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Por todo ello, instó a que “no haya más mentiras, no más retrovisores”, instando al presidente Gustavo Petro a gobernar “pensando en la gente, no en favorecer a una camarilla de personas que hacen parte de un concierto ideológico extremista que se hace llamar progresista, pero que en realidad es ‘pobresista’”.
En esa línea, el exmandatario alegó que el Gobierno ha contaminado con convicciones ideológicas las necesidades de todos los sectores del pueblo colombiano, en particular, la salud y la pensiones, así como la moral de la Fuerza Pública que, dijo, se ha deteriorado porque “han premiado a criminales”.
“Así ha sido con el sector de la salud, donde han pretendido devolvernos al Seguro Social o las pensiones, que han pretendido convertir en la caja menor o el cajero automático del Gobierno para financiar muchas locuras, como el tal puente elevado entre Buenaventura y Barranquilla”, manifestó.
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