Algunas personas dicen que diciembre no es lo mismo si no estallan pólvora. Por eso es común ver que en este mes del año aumente el uso de esos implementos en las diferentes ciudades del país durante las festividades, a pesar de que quienes los usan corren el riesgo de quemarse.
En lo que va de este mes se han reportado 503 casos de personas quemadas con pólvora en el país, de las que 181 han sido niños. En la mañana de este lunes, en conversación con Blu Radio, Giovanny Rubiano, director del Instituto Nacional de Salud (INS), dio a conocer la lista de los tipos de pólvora que más quemados ha dejado en Colombia.
Los totes, unos implementos redondos que se activan cuando la persona los fricciona contra el suelo y que son en apariencia inofensivos, fueron los primeros implementos que nombró el funcionario. Acceder a este tipo de pólvora es relativamente sencillo y por su manera de uso es fácil que los niños la utilicen.
Lo mismo sucede con las chispitas mariposas, unas barritas que se venden en cajas, se prenden con un encendedor y los niños suelen utilizar para hacer figuritas imaginarias en el aire con ellas durante el tiempo que duran prendidas.
Los voladores, unos típicos palos de madera que tienen en la parte superior un la pólvora que los activa, fueron el tercer tipo de estos implementos que el funcionario mencionó.
La manipulación de estos es un poco más compleja que la de los anteriores, ya que requiere que la persona lo tenga en sus manos hasta pocos segundos antes de que “despegue” del suelo hacia el aire, en donde estalla. En ese proceso se puede desviar si la persona lo suelta mal o permanece con él, por lo que las quemaduras con este implemento sean de las más frecuentes.
Los volcanes de pólvora, una especie de triángulos cuyo uso es común, no solo en diciembre, sino incluso en espectáculos como conciertos, obras de teatro, entre otros, es otro de los implementos que más quemados ha dejado durante las festividades decembrinas de este año.
El funcionamiento de estos implementos es relativamente sencillo. Se pone en el suelo, se le prende la punta con un encendedor y luego del triángulo salen los destellos que no duran más de dos minutos. Es algo parecido a las “velas mágicas” que suelen utilizarse en los cumpleaños.
Las papeletas, tacos o mechas, unos triángulos pequeños que son utilizados en juegos tradicionales como el tejo, son otro de los implementos que más quemados ha dejado en el país, según el funcionario.
Aunque hace varios años se vienen haciendo campañas para evitar su utilización, tanto por parte del gobierno nacional como de los entes territoriales, el uso de estos implementos sigue en boga, sobre todo en la temporada decembrina. Por eso, Rubiano enfatizó en la importancia de que los adultos tomen consciencia de las consecuencias que puede traer su uso, sobre todo en los menores de edad.
“Este es un tema que no es menor y que le corresponde a los adultos tener responsabilidad, no podemos ni siquiera echar totes, ni chispitas, mucho menos los voladores. Recordemos que un accidente de estos es muy grave, las consecuencias son nefastas para el sector salud, para todo el sistema, pues las partes más afectadas en los niños son la cara, los ojitos, la nariz, los oídos y las manos”, comentó a la estación radial.
El director del INS concluyó diciendo que es importante recordar que los procesos de cicatrización de las lesiones que generan las quemaduras por pólvora es lenta y muchas veces deja consecuencias permanentes en quienes las padecen. Evitan el uso de estos artefactos es la mejor manera de prevenir.
