En un 196% aumentó el desplazamiento forzado en Colombia entre enero y noviembre del 2021, en comparación con los datos del 2020, divulgó en un informe la Oficina de la ONU para la coordinación de asuntos humanitarios, OCHA.
La oficina documentó 159 emergencias masivas que obligaron al desplazamiento de 72.300 personas, de las cuales solo el 26% ha podido retornar a sus lugares de origen sin garantías de seguridad, en la mayoría de los casos.
Es decir que 53.150 personas permanecen desplazadas en el país, con limitaciones de acceso a servicios básicos y condiciones óptimos de salud en medio de la pandemia.
La mayoría de los desplazamientos - el 33% - fueron ocasionados por amenazas por medio de panfletos, llamadas intimidantes, entre otros, atribuidas a grupos armados ilegales. La segunda razón - el 24% - fue escapando de los enfrentamientos ocasionados por dichos grupos.
El litoral Pacífico del país es la región más afectada por este fenómeno, sin embargo, OCHA mapeó eventos en todo el occidente del país, desde el Urabá hasta Tumaco. También hubo casos en Norte de Santander, Arauca, Guaviare, Putumayo y una intensificación en Antioquia.
Es por ello que el 54% de las víctimas son población afrodescendiente y el 15% es población indígena. Además, 12.848 menores de edad, se encuentra entre la población afectada durante el 2021.
En ese periodo analizado, hubo 2.200 ataques en contra de la población civil y los lugares donde ocurrieron coinciden con municipios de ocurrencia de desplazamientos forzados. Esto representó un 36% más ataques que los reportados en el 2020, un año en el que hubo cuarentenas y limitaciones a la movilidad por la pandemia del covid-19.
La OCHA también documentó que 57.500 personas fueron obligadas a confinarse en un año donde no estaban dichas limitaciones, pero no por las orientaciones de salud pública, sino por amenazas de los grupos armados ilegales.
Un 32% de los confinamientos ocurrieron por acciones de estos grupos con el fin de mantener el control territorial en zonas donde hay reportes de cultivos de uso ilícito.
En Chocó, la iglesia católica reportó el confinamiento de poblaciones indígenas municipios del sur del departamento, por enfrentamientos entre el ELN y el Clan del Golfo.
De hecho, el 78% de las víctimas de confinamiento han sido los indígenas - 45.100 personas-. Otra de las razones de los confinamientos es la instalación de minas antipersonales, con mayores reportes en Chocó y Antioquia, que han limitado la circulación incluso para abastecimiento.