Otro asesinato tiene consternados a los bogotanos. Las autoridades encontraron, dentro de una caja, el cuerpo sin vida de un hombre cerca a las instalaciones del estadio El Campín en la madrugada de este lunes.
De acuerdo con la información que se conoce hasta el momento, la víctima primero fue torturada y después asesinada. Así lo comprueban las quemaduras que las autoridades hallaron en su pecho.
Además, se estima que el homicidio ocurrió en otra zona de la capital del país y luego los delincuentes trasladaron el cuerpo de la víctima hasta la zona del escenario deportivo, ubicado en la localidad de Teusaquillo, al centro-occidente de Bogotá.
La cabeza de la víctima, quien se estima que tenía entre 35 y 40 años, estaba cubierta con una bolsa plástica. De momento las autoridades investigan lo sucedido para determinar la identidad del occiso, quiénes fueron los responsables del hecho y cuál fue el lugar donde se produjo el asesinato.
Con este hecho se refuerza la percepción de inseguridad en la capital del país. De acuerdo por el diario El Tiempo, el pasado mes de febrero, el índice de percepción de inseguridad en Bogotá es superior al 60%.
Esto se explica si se tiene en cuenta que, según datos del Concejo capitalino, el 40.5% de los robos que se registran en toda Colombia ocurren en la capital del país.
“En el 2023, en Bogotá se cometieron 147.666 hurtos a personas de los 364.531 que ocurrieron en todo el país. Posicionando, lamentablemente, a Bogotá, como una de las ciudades de América Latina con mayores índices de criminalidad”, dice un informe del Concejo publicado el pasado 12 de febrero.
En lo que va de 2024 también han ocurrido otros asesinatos que han dejado consternados a los habitantes de Bogotá, como el del empresario Roberto Franco Charry, quien murió en medio de una balacera que se produjo en un restaurante del Parque de la 93, una de las zonas más exclusivas del Norte de la capital.
Todo eso, a pesar de que el alcalde Carlos Fernando Galán manifestó el pasado mes de febrero que la seguridad en la ciudad se iba a reforzar luego de la llegada de 700 efectivos de la Policía. Sin embargo, Bogotá sigue siendo una ciudad en la que sus habitantes viven con una zozobra constante.