La decisión del Gobierno de traer a Colombia entre 35 y 50 niños palestinos para que sean atendidos en el Hospital Militar alimentó las críticas al presidente Petro por su postura frente al conflicto en la Franja de Gaza y reveló otro episodio de anuncios simbólicos que pueden desdibujarse en la práctica.
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Hace casi dos semanas, desde Suecia, la viceministra de Asuntos Multilaterales, Elizabeth Taylor Jay, hizo el primer anuncio que ha tenido evolución a cuenta gotas: “Colombia, con el espíritu de la diplomacia por la vida en todas sus formas y atendiendo nuestra política de paz total y el apoyo humanitario que hemos dado a países, incluyendo Palestina por todo lo que ocurre en Gaza, ha tomado la decisión de apoyar de manera humanitaria unos niños palestinos que viajarían con sus familias a Colombia para su rehabilitación”, informó Taylor.
La antesala del anuncio fue una reunión del presidente Gustavo Petro con 26 embajadores colombianos en Europa en su reciente visita a Suecia y de que el Canciller Luis Gilberto Murillo asistiera en Jordania a la conferencia “Llamado a la acción: respuesta humanitaria urgente para Gaza”. En el encuentro del mandatario con los diplomáticos, además de tirar línea sobre asuntos de política exterior, se fijó la necesidad de que el gobierno colombiano asumiera otro gesto simbólico de cara a lo que está sucediendo entre Israel y Palestina. Petro había decidido romper relaciones con Israel a principios de mayo pasado, lo que produjo que en días re- cientes el embajador Gali Da- gan abandonara Colombia.
Por eso la llegada de niños y niñas palestinos al país profundiza el apoyo del jefe de Estado colombiano a la causa palestina y fortalece su búsqueda por ser un “líder mundial” que se replica cada vez que Petro acude a escenarios internacionales.
“No entiendo por qué se protesta contra el que los niños palestinos sobrevivientes heridos en el genocidio pue- dan ser atendidos en el hospital militar. El hospital militar se llenaría de gloria mundial si atiende a los niños sobrevivientes del holocausto”, dijo el mandatario en la red social X tras la movilización de miembros de la Reserva Activa de las Fuerzas Armadas, quienes marcharon en contra de esa propuesta y también la de que firmantes de paz sean atendidos en ese centro hospitalario.
No es la primera vez que sucede. Pues en ese centro asistencial, en efecto, han sido internados desmovilizados de grupos armados y han compartido espacio con quienes antes eran sus adversarios en el conflicto. Para algunos este tipo de gestos significa un acto de reconciliación y para otros una ofensa.
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¿Cómo será?
Lo cierto es que más allá de los anuncios y el gesto humanitario, la propuesta no se ha consolidado del todo. EL COLOMBIANO preguntó por mayores detalles a la Cancillería, que está al frente del proceso, pero respondieron que lo único que se sabe es lo dicho por el canciller Luis Gilberto Murillo hace unos días: “Vamos a iniciar rápidamente, ya lo tenemos muy avanzado, un plan de ayuda humanitaria (...) que tengan algún tipo mutilación y que están en Egipto afectados por el conflicto en Gaza. Que puedan venir con sus acompañantes y familiares por un periodo de hasta seis meses y regresar luego a Egipto”.
Pero, ¿cómo el Gobierno va a traer los menores a Colombia y cuánto costará su permanencia en el país? ¿Habrá acompañamiento psicológico a los palestinos, quienes vendrán a una tierra donde no hablan su idioma?
Todavía no se resuelven preguntas, pero el canciller Murillo aseguró que ya se comunicó con su homólogo en Egipto, donde permanecen los niños, para confirmar la decisión y que “analiza con gobiernos y organizaciones humanitarias internacionales los aspectos operativos del programa. Más detalles de las nego- ciaciones y acuerdos con go- biernos y organizaciones aliadas serán dados a conocer próximamente”.
Mientras tanto, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, cuando fue interrogado en el Cauca sobre cómo sería la atención en el Hospital Militar de las familias palestinas, dijo: “En esto apenas estamos en la coordinación con Cancillería, que es la que tiene el liderazgo de ese proyecto. De manera que en estos momentos todavía es muy prematuro hacer anuncios por parte de Defensa en cuanto al Hospital Militar, porque todo depende de la coordinación con la Cancillería. (...) solo teniendo claridad del proyecto que lideraría Cancillería nosotros podríamos así hacer la valoración de costos, posibilidad de atención, de extensión en el tiempo, etc”.
Los anuncios tras la propuesta del presidente Petro dan la sensación de que antes de consultar la viabilidad y previsión logística y presupuestal, el mandatario lanzó al aire la idea y ahora las carteras de Relaciones Exteriores y Defensa están corriendo para hacerlo realidad. El gesto puede llegar a ser más simbólico que otra cosa, dada la dimensión de la guerra, donde miles de niños y niñas han sido asesinados por los bombardeos y quienes han sobrevivido perdieron a miembros de su familia y el lugar en el que vivían.
¿En qué va el conflicto?
La guerra estalló en octubre pasado cuando los terroristas de Hamás atacaron por sorpresa el territorio israelí, causando la muerte de miles de personas. Además, otro centenar de personas fueron secuestradas y hoy, pasados ocho meses, siguen en manos de los criminales. Como venganza, Israel prometió exterminar a los miembros de Hamás, quienes se ocultan en Gaza y otros sitios de Palestina; de ahí que las bombas, para atacarlos caigan casi siempre en las zonas residenciales provocando la muerte a cerca de 37.000 personas, según registros de la ONU. La ofensiva de Israel, al mando del primer ministro Benjamin Netanyahu, ha sido fuertemente criticada incluso por aliados como Estados Unidos.
Actualmente, las tropas israelíes prosiguen con su invasión terrestre en Rafah, en el sur de palestina, al tiempo que bombardearon tres campos de refugiados.
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