La Fiscalía General de la Nación anunció este jueves que la fiscal Angélica María Monsalve Gaviria no seguirá al frente de la investigación adelantada contra Martín Manjarrés y Marcela Montes por el escándalo del uso irregular de vehículos blindados adscritos a la Unidad Nacional de Protección (UNP).
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De acuerdo con el ente acusador, la decisión se tomó luego de una recusación presentada por los investigados, quienes buscan acreditarse como víctimas en el proceso penal que se adelanta contra Monsalve por concusión, por el que fue imputada en contumacia en diciembre del año pasado tras ausentarse en seis audiencias.
La recusación argumentó que la fiscal no podía continuar con la causa en contra de Manjarrés y Montes porque presuntamente solicitó sobornos para desviarla, que es lo que sostiene la misma Fiscalía en el caso por concusión. Según la entidad, Monsalve pidió $600 millones al hijo de Manjarrés a través del abogado Jimmy Forero.
La Dirección de la Seccional Bogotá concluyó que el recurso cumple con lo normado en el Código de Procedimiento Penal. En ese sentido, se espera que en los próximos días la Fiscalía, en cabeza de Francisco Barbosa y Martha Mancera por dos semanas más, asigne a un nuevo investigador para continuar con el proceso.
Por el momento, la Fiscalía sostiene que Forero citó al hijo de Manjarrés en Bogotá para discutir sobre el caso que hasta este primero de febrero estuvo en manos de Monsalve. La tesis es que, como él no pagó la millonaria suma exigida ni firmó un comprobante del acuerdo realizado, Angélica Monsalve procedió a imputarle cargos.
Además, el órgano penal espera imputar a Monsalve por falsedad en documento público y fraude procesal, pues, supuestamente, participó en noviembre de 2022 en la alteración de varios documentos mientras fue funcionaria de la Unidad de Administración Pública de la Seccional Bogotá. El resultado fue un principio de oportunidad presuntamente irregular.
Hasta el momento, Monsalve no ha acudido a las diligencias de imputación de ninguno de esos dos casos. Además, ha insistido en que los llamados de la justicia en su contra son una persecución del fiscal Barbosa y la vicefiscal Mancera. En su cuenta de X dijo que se trata de “la gestión de la Fiscalía más inmoral que hemos tenido”.
“Supongo que los que delinquen están a salvo en manos de Mancera y Barbosa, quienes ahora descansan en su regazo. Ahora creerán que porque me recusaron ya sus delitos se borraron. Barbosa y Mancera han saboteado con alevosía el caso de los carros blindados”, escribió la funcionaria, quien señaló que ambos directivos “prevarican”.
