Por @jofesos

Hernás Barcos es la cuota de gol más sobresaliente de Nacional este semestre. Lleva dos anotaciones. Cortesía Stivens Castaño
Contra Libertad de Paraguay en el Atanasio Girardot, Nacional no solo se juega la posibilidad de avanzar a la fase de grupos en la Copa Libertadores, sino quitarse de encima una racha que acumula de cinco partidos sin ganar en las competiciones oficiales que disputa en este 2019.
Sí, son cinco partidos en los que el equipo de Paulo César Autuori no conoce la victoria dentro ni fuera de Medellín. Contra Huila se empató a un gol en Neiva. Frente a La Guaira, en Venezuela, se empató sin goles. Después Nacional recibió a Equidad y empató a un gol.
En el partido de ida en Libertadores ante Libertad cayó 1-0 y finalmente el pasado fin de semana se repitió la derrota 1-0 por la Liga Águila ante el Unión Magdalena en Santa Marta. ¡Qué racha!
En el torneo local Nacional tiene dos victorias. Una de local ante Jaguares y otra de visitante ante Bucaramanga. En el torneo continental suma la victoria ante La Guaira. Hasta ahí el promedio de un equipo que inicia un proceso con un doloroso ausente: el gol.
Durante el 2019, por torneos oficiales (Liga Águila y fase previa de Copa Libertadores) Nacional solo ha anotado cinco goles en nueve partidos. Otra de esas necesidades imperiosas del equipo verdolaga, que ha malogrado en pies de sus jugadores muchos acciones que estaban ya en la tráquea de sus hinchas. Es decir, marca gol cada 162 minutos.
Dos de los cinco goles han sido anotados por Hernán Barcos, refuerzo que llegó al equipo verdolaga para 2019. El porqué no se anotan más goles puede ser tema para otra columna. Los otros tres tantos han sido anotados por Juan Pablo El Indio Ramírez, Pablo Ceppelini y Sebastián Gómez.
Lo anterior demuestra que la cuota goleadora, por ahora, está en pies del argentino que oficia como delantero, y tres volantes. ¿Y los otros delanteros? El caso Ómar Duarte está más que referenciado. Ganas no le han faltado al jugador de 23 años. Es como si una maldición le hubiera caído encima, porque las opciones las ha tenido de inmejorable manera.
El otro caso de los jugadores principales llamados a cubrir la plaza de 9 es Carlos Rivas. Quien en palabras del técnico de Nacional ya no hará parte de las nóminas dada su baja producción y la no aceptación de la opción de compra por parte del club. Y es que los números de Rivas poco defienden su estadía en el verde.
Rivas, que llegó como refuerzo de Nacional para el segundo semestre de 2018-II, disputó 11 partidos de 19 disputados en ese semestre en Liga Águila. Fue titular en seis de ellos y uno lo jugó completo. Resultado cero goles anotados.
En el caso de la Copa Águila de 2018. El delantero jugó en siete de los ocho partidos. Cuatro de ellos de titular y ninguno lo jugó completo. Marcó dos goles (uno cada 3.5 partidos) que finalmente serían los únicos de la temporada, incluso sumando la participación en Copa Libertadores. En 2019 no anotó goles y ya se conoce su desenlace.
Por eso, el de la noche del jueves será otra oportunidad para que Nacional se quite de encima los fantasmas del área rival. Un problema que hoy en día lo tiene octavo en la tabla de posiciones del torneo local y con la desventaja ante el equipo paraguayo, al que se espera se pueda derrotar con el acompañamiento de la hinchada en el Atanasio.
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