No pasaron dos años desde que la energía eléctrica llegó a Vigía del Fuerte para que justo el pasado 31 de agosto un vendaval arrasara con todo y dejara nuevamente a oscuras a casi 5.000 personas de esta localidad. Allí, según el reporte de las autoridades, necesitan ayuda urgente.
Wilton Araujo, jefe de la Unidad de Servicios Públicos y coordinador de Gestión del Riesgo del municipio, sostuvo que el daño que los tiene sin “nada de energía eléctrica en toda la cabecera municipal y en inmediaciones con Murindó” tuvo lugar en medio de una fuerte tormenta que también dejó casi 300 casas afectadas.
Algunas viviendas registraron afectaciones leves y otras terminaron destechadas. “La problemática es crítica, no hay un término que describa la magnitud del problema. El agua arrasó con cultivos, están en el suelo, y estos son los ingresos de las familias, con lo que se alimentan”, afirmó Araujo.
Pero esta no es otra cosa que la ambientación de un mal peor. Según el coordinador del riesgo en la localidad, 43 de los 72 kilómetros que constituyen el carrusel eléctrico que permite la llegada del servicio a la zona terminaron afectados. Esto es más de la mitad del complejo estrenado en diciembre de 2021, cuando allí llegó la energía en pleno.
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La tormenta afectó el territorio comprendido entre el sector de Casa Bomba y Vigía del Fuerte. “Muchos árboles cayeron sobre las líneas eléctricas, algunas terminaron enterradas y otras, aunque no están bajo suelo, se dañaron y eso impide el flujo de energía”, agregó Araujo.
El funcionario proyecta que una intervención que permita rehabilitar el servicio en la zona costaría miles de millones y que la localidad no cuenta con recursos para esta tarea. Aunque la novedad ya se reportó ante las autoridades departamentales y en el momento la localidad avanza en una caracterización de Afectados, allí aún no se adelantan trabajos de mitigación.
“Pedimos apoyo al Dagran, al Departamento, al Ministerio de Minas, porque el arreglo de este problema podría valer miles de millones de pesos y acá no tenemos recursos para subsanar esta situación”, agregó el funcionario, que además proyecta que esta emergencia va para largo.
Lo cierto es que toda la cabecera municipal está sin energía en este momento. Allí había llegado el servicio en pleno, con conexión al sistema nacional, en diciembre de 2021. En Vigía del Fuerte lo único que esperan es no tener que pasar la Navidad de este año a punta de vela.
