Tal como lo registró este diario aquel mes, las víctimas fueron identificadas como Cristian Rufino Zuluaga Soto, Leidy Johana Cardona Hurtado y Abelardo Antonio Cortés Ríos, que según los reportes preliminares al parecer habrían sido asesinados en medio de un lío de tierras.
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Los homicidios generaron especial conmoción por ocurrir en presencia de un niño de dos años, que resultó ileso.
“Lo que podemos decir con claridad es que el menor de edad, hijo de la pareja, está ya con familiares; está bien, está sano y salvo, y obviamente estamos acompañando desde el personal de la Comisaría de Familia todo el proceso con el menor”, informó el entonces alcalde de Abejorral, Julián Muñoz.
Pese a esas versiones iniciales, la Fiscalía General de la Nación informó que luego de adelantar las primeras pesquisas la nueva hipótesis de los asesinatos correspondería a motivos pasionales, ya que una de las víctimas era excompañera sentimental del principal sospechoso, que en dicho municipio sería conocido presuntamente con el alias de Satanás o Porcelana y que para el momento de los hechos cumplía una medida de aseguramiento en su casa.
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“Este hombre presuntamente retuvo a su excompañera sentimental cuando se movilizaba con su actual pareja y otra persona. Las tres víctimas trasladaban café que acaban de recolectar en una finca de la vereda Santa Ana. Al parecer, atacó a la mujer en 15 oportunidades con arma blanca y le propinó dos disparos con arma de fuego”, informó la Fiscalía en un comunicado, apuntando que el homicidio de la mujer al parecer se habría perpetrado por el hombre como retaliación por terminar con su relación.