En la iglesia Nuestra Señora de La Candelaria usted puede rezar por el perdón de sus pecados, por la salud de los seres amados y, de paso, para que no lo atraquen a la salida.
De acuerdo con los registros oficiales, los alrededores de este magno templo de Medellín se convirtieron en uno de los escenarios más frecuentados por los ladrones. En conjunto con el parque de Berrío y la estación Berrío del metro, conforma uno de los circuitos más azotados por escaperos, raponeros y timadores.
Aunque no todos los hurtos se denuncian, en la base de datos de las autoridades figura que en 2018 hubo 220 robos a personas en los cruces de la calle 50 con las carreras 50 y 51, es decir, en las esquinas del citado parque.
Monseñor Luis Fernando Pérez, párroco de la basílica de La Candelaria, señala que “hay muchos comentarios de las personas, dicen que hay bastantes atracos y robos de celulares, aunque a la parroquia no la han afectado directamente y por el parque sigue circulando la gente normalmente”.
Añade que, de vez en cuando, sucede que los feligreses dejan paquetes en las bancas para arrodillarse a orar y cuando se levantan ya les han robado, “pero eso ocurre de manera esporádica”.
EL COLOMBIANO indagó acerca de cuáles son los lugares de la ciudad más perjudicados por asaltantes. Para el análisis se tomó el periodo 2017-2018 y las cifras del Sistema de Información para la Seguridad y Convivencia (Sisc) de la Alcaldía.
En esos dos años hubo incremento en los casos de hurto a personas, al pasar de 17.719 en 2017 a 21.079 en 2018; en robo de motos, de 3.982 a 4.707; y en asaltos a residencias, de 1.788 a 1.980. La reducción se notó en el robo de carros, que pasó de 1.028 a 998; y en los atracos a establecimientos comerciales, que mermaron de 4.366 a 4.279.
Si tomamos el último año, en total se registraron 33.043 robos de toda clase, es decir, 90.5 diarios y 3.7 cada hora. Frente a esta realidad, ¿en qué sitios hay que tener más cuidado?
Panorama del hurto a personas
Si hablamos de este aspecto, el Centro (comuna 10) se lleva los deshonores. El año pasado registró 7.047 episodios, siendo la comuna más afectada.
Y si observamos con lupa la situación, desde 2017 hay tres barrios en los que se ha concentrado esta dificultad: La Candelaria (5.002 hechos sumando los dos años), que alberga la iglesia, el parque, la estación Berrío y el Banco de la República; Colón (1.243) y Guayaquil (1.020).
En el primer mes de 2019 La Candelaria continuó siendo el vecindario más agobiado, con 124 robos a personas, es decir, cuatro diarios.
Ladrones que van detrás de los carros
En el último año, las comunas de Laureles (148), Belén (127) y Guayabal (117) mostraron las cifras más elevadas en este asunto.
Los barrios en los que más hurtaron carros entre 2017 y 2018 fueron Santa Fe (59), Rosales (49) y Campoamor (48).
De hecho, con la estrategia Segmentos de Vía, la Administración tiene priorizadas para la vigilancia tres direcciones en Santa Fe: calle 18 con carrera 54, carrera 57 con calle 20 y calle 17A con carrera 54.
En enero de 2019, las barriadas en las que más carros usurparon fueron Santa Fe, Campoamor, Florida Nueva y Miranda, con tres casos cada una.
Cuidado si pasa en moto por estos lados
Las comunas con más despojos de este tipo en 2018 fueron el Centro (771), Robledo (466) y Castilla (458).
En cuanto a los barrios, si tomamos el periodo 2017-2018, los lugares con mayor reincidencia son Prado (185), Boston (154) y Manrique Central N°1 (131).
Si usted se moviliza en moto, debe tener especial cuidado con tres esquinas en las que más hechos se presentaron: carrera 63 con calle 94A (Palermo), carrera 62 con calle 58 (El Chagualo) y calle 78B con carrera 72A (inmediaciones del hospital Pablo Tobón Uribe).
El pasado mes de enero, el barrio Buenos Aires registró siete robos de motos, seguido de Boston, con seis, y la cabecera corregimental de San Antonio de Prado, con seis.
Asaltos a locales comerciales
De nuevo el barrio La Candelaria resulta ser el más perjudicado de Medellín, con 843 asaltos a locales en el lapso 2017-2018; le siguen Belén Parque (209) y Naranjal (191).
Y en lo que va de este año, La Candelaria ajusta 26 casos, por encima del barrio Colón, que lleva nueve.
El año pasado, las cuadras más peligrosas para los dueños y empleados de establecimientos públicos fueron la carrera 43A con la calle 7 sur (La Aguacatala), la calle 44 con la carrera 65 (Naranjal), y la carrera 48 con la calle 14 (inmediaciones del C.C. Monterrey). En estas tres esquinas hubo 142 incidentes, o sea, uno cada 2.5 días.
Hasta en la casa hay que tener cuidado
Las comunas de Laureles, Belén y El Poblado ocupan el top 3 entre aquellas en las que los ladrones asaltan más viviendas. Albergan a la población con mayor capacidad económica de la ciudad y llevan dos años continuos siendo las más golpeadas por los apartamenteros.
En cuando a los vecindarios, en el periodo 2017-2018 el barrio Laureles sufrió 61 asaltos a residencias; Boston 55 y Prado 54. Así que cuidado con quienes deja entrar a su propiedad y verifique que las chapas funcionen bien.
Las cuadras con “apartamentazos” más repetidos en el último años están en Carlos E. Restrepo, con cuatro hechos (transversal 53A con carrera 65); otros cuatro en Calasanz (calle 54 con carrera 85) y tres más en Robledo (carrera 90 con calle 65C).
Las medidas de las autoridades
Si bien el panorama es complejo, las autoridades no se han quedado quietas contra este apuro. El secretario de Seguridad de Medellín, Andrés Tobón, resalta que en lo corrido de 2019 (hasta febrero 17) se presenta una reducción del 16% en el índice del hurto a personas, en relación con el mismo periodo del año anterior, al pasar de 2.322 casos a 1.961. Adicionalmente, el hurto de carros mermó un 24%.
Explica que la estrategia para combatir a los ladrones tiene dos vertientes: la primera es la investigación judicial, con el Grupo Contra Atracos de la Sijín y la Fiscalía, dedicados a propinar golpes estructurales a las bandas; la segunda tiene que ver con la prevención y reacción, articulada con el Plan Cuadrantes de la Policía y un grupo especial de reacción motorizada, conectados con la Sala Situacional del 123, en la que se focalizan las cámaras de vigilancia contra el hurto.
El pasado 19 de febrero el general Eliécer Camacho, comandante de la Policía Metropolitana, presentó uno de los más
recientes resultados contra esta clase de bandidaje. Capturaron a tres miembros de “los Propios”, un combo que suplantaba a las autoridades vistiendo uniformes de la Policía, el Ejército y el CTI, para cometer los atracos.
El año pasado habían arrestado a otros nueve miembros. “Los Propios” están implicados en 14 robos perpetrados entre 2018 y 2019.
También se destaca que este año van 131 capturados por hurto a establecimiento comercial, 227 por robarle a ciudadanos y 23 más que trataron de usurpar motos.
En La Candelaria, el barrio en el que más gente y locales atracan, monseñor Pérez reconoce que siempre hay vigilancia policial “y cada vez que uno los llama, atienden rápido”. Ojalá que sus oraciones y la presteza de la Fuerza Pública alejen de la zona a tantos enemigos de la tranquilidad y del bolsillo .