16
mil metros cúbicos de concreto fueron lanzados como soporte en Mulatos.
65
% de avance alcanzan las obras en Pacífico 2, según la Concesión La Pintada.
En las entrañas de la montaña, entre el lodo, las retroexcavadoras y el cemento, el trabajo de obra tiene un tanto de azar y también de estrategia. Nunca se sabe qué va a encontrarse, dicen los ingenieros, porque a pesar de los estudios técnicos y la previsión humana, toda excavación subterránea está siempre expuesta a la incertidumbre.
Pero esta vez, al interior del macizo rocoso, bajo el escrutinio de ingenieros y trabajadores, la imagen que queda es más de certezas que de dudas. Se trata del túnel Mulatos, en inmediaciones del municipio de Tarso, que recién culminó con éxito el “cale”, es decir, la unión de los dos frentes que venían trabajando en extremos distintos y que ahora permiten el paso de lado a lado.
Esta obra, ubicada en el macizo rocoso entre el río Mulatos (que le da su nombre) y el río Cauca, es la unidad funcional o tramo más crítico del proyecto Pacífico 2, a cargo de la Concesión La Pintada y una de las vías de cuarta generación en Antioquia. La excavación inició con el portal entrada en septiembre de 2017 y el portal salida comenzó tres meses después.
Para entenderlo mejor hay que decir que tiene 2,5 kilómetros de longitud y dos tubos (el derecho, de 2.413 metros y el izquierdo de 2.443 metros). Fue necesario, entonces, excavar 4.850 metros y comprar 192 predios en la zona. Además, 16.035 metros cúbicos de concreto fueron lanzados como soporte (eso son unas siete piscinas olímpicas).
Superada la tensión
Mientras camina por tramos del túnel que pronto serán revestidos con concreto, Gustavo Bernal, gerente de la Concesión La Pintada, señala sobre la tierra las marcas que quedaron en el punto exacto del cale y dice que esa fue la etapa más compleja de la construcción. Y ahora hay más tranquilidad, no solo para la Concesión, sino para las empresas constructoras y los inversionistas.
Para calcular los retos que tuvo el equipo de ingenieros en Mulatos, aquí otras cifras adicionales: fueron necesarias 480 toneladas de explosivos de Indugel en todo el túnel; se extrajeron 650.000 metros cúbicos de material de excavación (es decir, en promedio, 37.000 viajes en volqueta). El 90 % de ese material se trituró y se utilizará en la misma vía. 450 personas trabajaron dentro del túnel en 4 frentes durante 24 horas.
Con el cale, la conexión Pacífico 2, cuyo trazado comprende 96,5 km entre La Pintada - Primavera (Caldas) y La Pintada -Bolombolo (Venecia), promete unir a Medellín con el Eje Cafetero y con el puerto de Buenaventura y ya completa un 65% de avance de obra, explicó la Concesión.
Y esto no es poco, según Louis Kleyn, presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, las vías Pacífico 1, 2 y 3 serán claves para el suroccidente del país: conectarán la Autopista del Café y las vías concesionadas del Valle del Cauca, que tienen conexión con Buenaventura.
La ANI añade que, con estas obras, el tiempo de viaje entre Cali y Medellín para un camión de cinco ejes se reducirá de 15 a 8 horas y un vehículo particular podrá hacer el recorrido en cinco horas.
Unir al Centro y a la Costa
Bernal hace énfasis en que lo más satisfactorio, si se quiere, es saber que en Mulatos se atravesaron varias fallas geológicas y los procesos se hicieron de manera acertada.
Justo en donde varios frentes trabajan en la etapa de revestimiento en concreto (que ahora alcanza los 1.650 metros), el gerente se detiene y cuenta que está emocionado caminar por el interior de una montaña que, en cuestión de un año, va a estar llena de vehículos que movilizarán la carga hasta el puerto de Buenaventura en el Pacífico.
“Este túnel, en términos de conectividad, garantiza la seguridad del proyecto y permite que la vía mantenga el ritmo de velocidad que debe tener de 80 kilómetros”, indica.
Ahora Mulatos pasa a una siguiente fase para finalizar el revestimiento definitivo, el drenaje y la dotación. Estará listo, según Bernal, a mediados de 2020 y, en octubre de ese año, está previsto que opere Pacífico 2 completa.
Avanza a buen ritmo
Sin embargo, la geología no es amable y el macizo rocoso que atraviesa Mulatos está ubicado en una región geográfica de puntos complejos que exige un trabajo preciso y un estudio juicioso de la topografía.
Así lo explicó Enrique Posada Restrepo, ingeniero mecánico y presidente de la Sociedad Antioqueña de Ingenieros (SAI), quien manifiesta que en la conexión Pacífico 2 las obras avanzan al ritmo esperando. Este túnel, indica, es un proyecto bien pensado desde el principio.
“En la SAI siempre decimos que Pacífico 2 es un proyecto para mostrar”, dice, “los visitantes aprecian el orden y los cuidados en la obra”.
¿Y qué tan compleja es, en términos de ingeniería, la construcción de este túnel? Posada agrega que si bien no es una excavación tan larga (el de mayor longitud es el túnel del Toyo, con 9,8 kilómetros), no deja de ser una extensión importante, con un reto mayor por tratarse de dos túneles en paralelo.
Según la Concesión La Pintada, este es el único del país en donde se está trabajando en los dos tubos en simultáneo, ya calados.
El ingeniero también destaca los “puentes sofisticados” que también construye la concesión sobre los ríos Cauca y Mulatos.
Que no olviden los pueblos
Aún así, con todo y los logros de infraestructura, persisten otros temores. A Ferney Darío Fernández, alcalde de Venecia, lo inquieta que con la construcción de las variantes, el corregimiento de Bolombolo quede relegado por el paso de las vías de cuarta generación. Porque, ¿quién va a transitar por el pueblo si pueden ahorrarse tiempo de recorrido?
César Augusto Zapata, alcalde de La Pintada, por su parte, expresa que esta localidad ha tenido respaldo de la concesión, con generación de empleo para las comunidades. Agrega, asimismo, que Mulatos es la prueba del potencial de la tecnología y la ingeniería colombiana, por lo que implica “un túnel de esa escala”.
Kleyn, de la ANI, ratifica que la construcción de las vías 4G implica, por supuesto, que muchos de estos trazados no van a pasar por el centro de los pueblos y, en ese sentido, tendrá que cambiar la dinámica comercial de los municipios. “Pero esta es una condición totalmente necesaria para que estas vías cumplan su cometido”.
Bernal, de la concesión, puntualizó que de toda la inversión en el proyecto ($1,3 billones), entre el 25 y 30% son sueldos de los trabajadores de la región. De forma similar, añade, cuentan con oficinas abiertas en los municipios de influencia y realizan campañas para que las personas se vinculen laboralmente.
“Bolombolo está habitado por gente humilde”, cuenta Fernández, “que sobrevive de un salario mínimo y trabaja en locales comerciales”.
Como alternativa, concluye, hay quienes decían que los negocios del corregimiento se irían desplazando hasta el área de las 4G. “Pero, —se pregunta el alcalde — ¿quién podría comprar esas tierras, que van a valorizarse?”.
Solo esperan, por el momento, que la construcción de variantes no deje al pueblo de lado, diezmado comercialmente y amparado en la esperanza de que la industria, quién sabe, decida asentarse en Bolombolo, llegar con su capacidad productiva y de empleo. Mientras tanto allí, en el corregimiento, sí sigue la incertidumbre .