De acuerdo con los reportes médicos, la fallecida tenía antecedentes de problemas cardiacos, a los cuales habría hecho caso omiso para escalar el atractivo turístico.
Una turista panameña falleció en la tarde de este sábado cuando escalaba la Piedra de El Peñol, en el municipio de Guatapé, al parecer por cuenta de los problemas cardiacos que padecía desde hace años atrás.
Los hechos se registraron en las escaleras de uno de los principales atractivos turísticos de Antioquia, cuando Maribel Alvarado Díaz, de 61 años, se desplazaba en compañía de su esposo y en uno de los tramos empezó a manifestar que le faltaba el aire.
De inmediato el compañero sentimental comenzó a pedir ayuda y el personal médico que está a cargo de este atractivo turístico hizo presencia en la zona y le prestaron los primeros auxilios.
“A la mujer se le prestaron los primeros auxilios, tenemos tres enfermerías dotadas y se hizo todo lo humanamente posible”, señalaron desde la administración de la Piedra de El Peñol.
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Pese a todos los esfuerzos, Maribel falleció y con apoyo de otros organismos de socorro cubrieron el cadáver de esta extranjera para evitar que fuera observado por los curiosos. Los médicos legistas certificaron la muerte y lo trasladaron al Hospital La Inmaculada, de Guatapé, mientras los familiares inicien los procesos de repatriación.
El esposo de la extranjera fallecida aseguró que ella presentaba problemas cardiacos, por los cuales estaba recibiendo tratamiento. Por esta razón, el hombre le había pedido que no subiera las 715 escaleras que conforman este monolito desde la base hasta la cima.
Sin embargo, Maribel prefirió hacer caso omiso a estas recomendaciones, pero en el camino presentó las complicaciones cardiacas que le terminaron provocando la muerte.
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La Piedra del Peñol es uno de los mayores atractivos turísticos para los visitantes y el cual se le dio apertura el 16 de julio de 1954 al ser escalada por primera vez por Luis Eduardo Villegas, en compañía de dos amigos aventureros, Pedro Nel Ramírez y Ramón Díaz.
Después de ello, Villegas decidió aprovechar unas grietas que tenía el monolito de 220 metros de altura para construir, primero, unas escaleras en madera, las cuales en 1970 fueron reemplazadas por las de concreto que actualmente sobreviven y que por 25.000 pesos pueden ser subidas por las personas que lo deseen.
Se estima que todos los días pueden subir entre 200 y 600 personas, según el día de la semana y cuando se encuentra en la cima pueden disfrutar de la vista panorámica y los establecimientos comerciales que allí se encuentran.
Su origen se remitiría a hace más de 80 millones de años y es un fragmento que se levanta sobre la tierra de una masa rocosa de más de 7.000 kilómetros cuadrados que se encuentra bajo el suelo el Oriente antioqueño. Esta parte de la piedra se habría levantado como parte de la erosión y los movimientos tectónicos que se dieron con el paso de los años.
