Heridas y hematomas en varias partes de su cuerpo, una incapacidad de 10 días y un estado de zozobra y miedo que podría tardar tiempo en superar. Eso es lo que padeció la mujer que fue brutalmente arrollada el pasado domingo 16 de febrero en Bello.
La mujer se encontraba acompañada por su hija, quien iba manejando en medio del taco, cuando a la altura del cementerio Jardines de la Fe sintieron un golpe duro que las sacudió. “Hija, nos dieron”, dijo la mujer quien de inmediato descendió para revisar qué había ocurrido y efectivamente se percató que una camioneta las había estrellado. Cuando el conductor de la camioneta, una Kia Sportage con placas KIX 067, descendió del vehículo lo único que atinó a hacer, según el relato de la mujer, fue alzar los hombros, decir que no le importaba y asegurar que ni llamaría al tránsito ni conciliaría de ninguna manera con las mujeres.
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Ante la respuesta, la mujer se contactó con el tránsito de Bello, le informó sobre la situación, le entregó la ubicación y la respuesta que obtuvo fue que entre cinco y 10 minutos los agentes de tránsito harían presencia en el lugar. Para entonces el hombre ya había retrocedido el vehículo alterando la escena del accidente y, según el testimonio de la afectada, presuntamente el sujeto estaba en estado de alicoramiento, además llevaba como pasajeros a dos jóvenes presuntamente menores de edad.
Al informarle la mujer que el tránsito estaba próximo a llegar, inmediatamente el sujeto abordó el vehículo, dejó abandonados a sus pasajeros y emprendió la huida que quedó registrada en videos que circulan en redes sociales. Lo que siguió fue un momento de absoluto terror para la mujer y su hija. El sujeto no tuvo reparo en pasarle el carro por encima a la mujer, quien de acuerdo con su testimonio terminó debajo del vehículo en un instante que le pareció eterno.
Cuando su hija descendió, y en medio de los gritos y la confusión de quienes presenciaron el hecho, la mujer yacía desorientada y solo gritaba que el tipo la había matado, que el carro la había reventado por dentro y antes de desmayarse le repetía a su hija que se había muerto. Una vez logró recobrar el conocimiento, el tránsito ya estaba en escena pues tardó mucho menos de los 10 minutos que había anunciado, por lo que inmediatamente solicitaron apoyo para lanzarle un operativo para dar con el conductor fugado. Al mismo tiempo, la hija intentaba mantener consciente a su madre mientras llegaba la ambulancia.
El hombre logró huir con destino a Copacabana y a su paso dañó varios vehículos, tal como quedó registrado en varios videos. Los jóvenes acompañantes huyeron de la escena atravesando la vía y corriendo hasta esfumarse.
A pesar de haber llamado al 123, la policía nunca apareció. La mujer fue trasladada de urgencia al hospital donde le trataron varias lesiones delicadas en la cabeza, el tórax y uno de sus brazos, principalmente. Recibió una incapacidad por 10 días y continúa bajo observación, pues los médicos todavía no descartan que sufra alguna secuela grave. También le valoraron que posiblemente atraviesa por un cuadro de estrés postraumático ante lo abrumador del hecho que vivió.
Ya instauraron la denuncia en Fiscalía por lesiones personales y tentativa de homicidio doloso. Con el diagnóstico, los videos y fotos que tomaron, el dictamen de Medicina Legal y el croquis del accidente, esperan que la Fiscalía avance rápido en el proceso y, según recalcaron, la justicia no solo haga justicia en su caso sino que evite que el sujeto siga al frente de un vehículo porque con lo que cometió advierten que es evidente que es una amenaza en las vías.
El hombre está plenamente identificado. A través de redes sociales los familiares de la mujer lo contactaron y aunque prometió presentarse para responder por el hecho no lo hizo. La familia asegura que prefieren poner todo en manos de la justicia y espera que la misma repare lo ocurrido en una noche de domingo que parecía tranquila pero que por cuenta de un salvaje al volante terminó convertida en una escena de terror.
La familia afectada señala que esperan información de los otros conductores afectados en medio de la huida de este sujeto para que responda también por esos daños.