Las autoridades encontraron este miércoles, en un puesto de control, el carro que le robaron a Natalia Loaiza Orozco, de 29 años, quien fue torturada, asesinada y hallada en la vereda El Noral, de Copacabana. La conductora de aplicación estaba desaparecida desde la madrugada de este miércoles, luego hallaron su cuerpo abandonado, pero su carro, un Ford Fiesta vinotinto, estaba desaparecido.
La mujer, casada, madre de dos hijos y residente en Sabaneta, había tomado un servicio en Medellín. La última vez que se supo de ella y de su carro fue cuando pasó por el intercambio de Solla, en Bello, hecho que quedó registrado en las cámaras de seguridad de este municipio. Sin embargo, después se perdió el rastro del automotor.
A Natalia la encontraron apenas estaba amaneciendo en un paraje abandonado, cerca de una finca, en esta vereda ubicada a unos 300 metros de la autopista Norte, amarrada de pies y manos y con signos de tortura.
Después de varias horas de búsqueda y rastreo, las autoridades ubicaron en las últimas horas el automotor de esta mujer, aunque tenía las placas cambiadas, pero las demás referencias concordaban con el vehículo de Natalia.
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El carro fue interceptado en un retén instalado conjuntamente por los agentes de la Policía y los guardas del tránsito en los alrededores de la Plaza de Mercado de Copacabana, cuando este automotor era conducido por dos personas, las cuales quedaron a disposición de las autoridades competentes, mientras se esclarece su responsabilidad en los hechos. Ambos serían residentes en la comuna 4 (Aranjuez).
Los agentes de la Sijín de la Policía Metropolitana avanzan en el peritaje del carro para dar con la estructura delincuencial que estaría implicada en los recientes hechos de hurtos y asesinatos de los conductores de aplicación.
Con la muerte de Natalia son 12 los conductores de aplicación asesinados desde noviembre del año pasado y seis durante el 2024, de acuerdo con los registros judiciales.