El río Murindó, en el Urabá antioqueño, está obstruido por cuenta de una empalizada. Así lo confirmó el Consejo de Gestión del Riesgo de esa localidad, que precisó que la situación afecta por ahora a la comunidad de la vereda Bartolo.
Aunque en el momento profesionales técnicos del Dagrán hacen presencia en la zona para identificar las causas de la empalizada, a través de sobrevuelos y caracterizaciones de los afectados, el reporte preliminar deja 34 viviendas evacuadas.
“Lo ideal es que se hagan auto albergues mientras se hace la intervención con maquinaria amarilla para remover el material. Cuando hay una obstrucción, el río busca otras zonas para fluir y ahí es donde se generan las inundaciones”, expresó Jaime Enrique Gómez, director de el Dagran.
Y agregó: “También hacemos un llamado porque no sabemos si este evento se genera por procesos de deforestación o movimientos en masa que luego el río arrastra. Sabemos que muchas comunidades indígenas usan el río para movilizarse por eso estamos trabajando para solucionar el tema”.
El río, como expresó el funcionario, es un corredor fluvial para las comunidades que habitan en la zona. Por esa razón, la entidad transferirá recursos para adelantar, en conjunto con la localidad, la limpieza y remoción de material que ha causado la obstrucción.
En marzo de este año, se registró una empalizada en el mismo sector. Entonces, la Gobernación también transfirió recursos para el retiro de sedimentos, proceso que tardó casi un mes. Sin embargo, sostuvieron desde el Dagrán, la empalizada actual es de una proporción mayor.
El personal técnico continuará evaluando la emergencia, que resultó en la inundación de decenas de casas porque los sedimentos obstruyeron el cauce normal del río. El parte de afectaciones materiales y ambientales aún se desconoce. Profesionales de gestión del riesgo trabajan en ese frente.