Cómo si se tratara de un péndulo, la lucha por el poder en la subregión del Occidente antioqueño avanza entre la disyuntiva de extender la continuidad de los gobiernos actuales o permitir el regreso de administraciones anteriores. En un territorio compuesto por 19 municipios, cada uno con su propio universo de alianzas y desencuentros entre los partidos, a poco menos de dos meses de la cita en las urnas en la mayoría de los territorios ya se perfilan los más opcionados para llegar al poder.
A pesar de la aparición de una amplia gama de candidatos y partidos, muchos de reciente nacimiento, el Occidente sigue siendo una arena dominada principalmente por liberales y conservadores.
Le puede interesar: Polémica en San Pedro de los Milagros: concejal se inscribió para repetir curul en el Concejo y terminó registrado en San Pedro pero de Urabá
Mientras en las elecciones pasadas los liberales lograron quedarse con las alcaldías de Buriticá, Frontino, Heliconia y Peque, los conservadores ganaron en Abriaquí, Armenia y Giraldo.
En alianza con otras colectividades, los conservadores también llegaron al poder en Caicedo (junto a la La U, el Mais y Colombia Renaciente), Olaya (junto a La U); y los liberales ganaron Anzá (junto a La U). En un caso especial, ambos partidos se unieron para quedarse con la Alcaldía de San Jerónimo (junto a La U y Cambio Radical).
Por fuera del espectro azul y rojo, el único partido que ha logrado pisar duro en la región durante las últimas elecciones ha sido el Centro Democrático, cuyo poder se siente con fuerza sobre todo en Sopetrán, Sabanalarga y Santa Fe de Antioquia.
Pese que durante el último cuatrienio el Occidente antioqueño ha aparecido en la agenda pública principalmente por sus problemas de seguridad -originados sobre todo por los choques entre el Clan del Golfo y las disidencias de las Farc-, así como las nuevas autopistas de cuarta generación que atraviesan el territorio, las preocupaciones de los ciudadanos están volcadas en otros temas, tal como coinciden múltiples líderes políticos locales.
Lea también: Exalcaldesa de Cañasgordas imputada por desvío de $2.100 millones busca repetir cargo en estas elecciones
La pavimentación de vías terciarias, el mejoramiento de los servicios públicos, el fortalecimiento del agro, la mejoría en los servicios de salud, entre otros, hacen parte de las prioridades de los votantes y podrían inclinar la balanza no solo en la lucha por el poder municipal, sino en el departamental.
En Santa Fe de Antioquia, cuya alcaldía es disputada por seis personas, las campañas de los más opcionados coinciden en que tras la puesta en funcionamiento de las autopistas 4G la prioridad del municipio es sacar del aislamiento a muchas de sus veredas y encontrar caminos para que el desarrollo que está trayendo esa nueva conectividad se derrame en el territorio.
En el caso de la Ciudad Madre, que en las pasadas elecciones legislativas sacó a relucir las fuertes bases de políticos como la representante María Eugenia Lopera y el senador Juan Diego Echavarría del Partido Liberal; la representante Yulieth Sánchez y senador Santiago Valencia del Centro Democrático; y el representante Juan Camilo Callejas y el senador Germán Blanco, del Partido Conservador, la lucha se libra precisamente entre esas tres colectividades.
Por el lado del Centro Democrático, que con el actual alcalde Felipe Pardo ganó en 2019 con un apretado margen del 37,40%, su apuesta para mantenerse en el poder está en manos del ingeniero Félix Giraldo, quien durante la última administración se desempeñó como secretario Gobierno, General, Hacienda, Desarrollo Económico, entre otros.
En la orilla contraria, los liberales y los conservadores unieron fuerzas para impulsar la candidatura de Yamid Carvajal, que hace cuatro años quedó en segundo lugar con un 31,84% de los votos, perdiendo la alcaldía por poco menos de 700 votos.
Como tercera opción también aparece la candidatura de Felipe Leal, inscrito por el Partido de La U y reconocido por ser hijo del exalcalde Hemel de Jesús Leal Sarrázola. En las elecciones pasadas, este último partido ocupó el tercer lugar, con un 13,9% de los votos.
Pese a que desde el uribismo se muestran confiados de sus opciones para mantenerse en el gobierno por otros cuatro años, para múltiples líderes locales todo apuntaría que el péndulo del poder ahora regresará a los liberales, que entre 2015 y 2019 gobernaron con el alcalde Saulo Armando Rivera.
Siga leyendo: Eugenio Prieto y Andrés Julián Rendón sellan alianza para competir por la Gobernación
Como dato no menos importante, la aspiración de Yamid Carvajal también es apoyada por el Partido Demócrata Colombiano, que pese a ser una organización política del Atlántico, en el caso antioqueño ganó fama tras lanzarle un salvavidas de última hora al exsenador Julián Bedoya para aspirar a la Gobernación.
La presencia del factor Bedoya en la ecuación pone sobre la mesa otra variable que podría marcar la lucha por la Gobernación de Antioquia en el Occidente, sobre todo en las toldas rojas.
Y es que pese a que el partido ya dirimió una puja que venían librando Bedoya y el exdirector del Área Metropolitana, Eugenio Prieto, por el aval -siendo este último el vencedor-, entre múltiples líderes liberales que integraban el ala de Bedoya quedó el sinsabor de que esa decisión se tomó escuchando más a las voces del Valle de Aburrá y Bogotá que la de las regiones.
Pese a que varios líderes consultados aseguran ser respetuoso de las decisiones de su partido, reprocharon que la campaña de Prieto es poco el contacto en terreno que ha tenido con el Occidente y podría estarse durmiendo en los laureles ante el avance de la candidatura de Luis Pérez, también de origen liberal y con un agudo olfato para sumar apoyos por fuera del Aburrá.
Otro municipio en el que esperan que la lucha por la Gobernación se decante es Sopetrán, en donde la alcaldía es disputada también por seis candidatos.
Allí el pulso central está entre Tatiana Carballo, que es la carta de la continuidad del Centro Democrático y La U; el exalcalde Yeison Estiven Paniagua Gutiérrez, apoyado por el partido Liberal, el Nuevo Liberalismo y el Partido Demócrata; y el candidato Euclides Álvaro Londoño, inscrito por el movimiento Sopetrán Nos Inspira y avalado por el Partido Conservador (que quedaron de segundos en las elecciones pasadas) y el partido del exalcalde de Medellín Federico Gutiérrez Creemos.
Según coinciden las campañas, como las matemáticas apuntan a que quien supere el techo de los 3.500 votos tendría todas las opciones de ganar, cualquiera de los tres tendría el margen para dar la sorpresa.
Por fuera de esos dos municipios, el péndulo del poder también puede ir al lado contrario en otros territorios. En Armenia, por ejemplo, los liberales avanzan con chances de recuperarle la alcaldía a los conservadores. En Cañasgordas, hoy gobernado por Aicardo Urrego, de Colombia Renacientes, la exalcaldesa Margarita del Rosario Lopera tiene muchas chances de regresar al poder. Por su parte, en Uramita, los conservadores se muestran firmes para mantenerse en el gobierno, así como los liberales de repetir en el municipio de Frontino.
