Los 42 días que estuvo Daniel Quintero por fuera de la Alcaldía de Medellín estuvieron marcados por la turbulencia, los insultos, saboteos y tutelatones. En ese lapso pasaron dos alcaldes encargados, Juan Camilo Restrepo y Andree Uribe. Este 21 de junio, con el anuncio de la Procuraduría de levantar la suspensión, Quintero vuelve a su despacho. Así fue su ausencia de la Alcaldía.
El pasado 10 de mayo, a las 7:00 de la noche, la procuradora general de la Nación, Margarita Cabello, hizo una alocución de poco más de dos minutos en la que anunciaba la suspensión de varios alcaldes por presunta participación política, entre ellos Daniel Quintero. Solo un día antes, el alcalde había publicado un polémico video en sus redes sociales con el mensaje “el cambio, en primera”. Al parecer, esa fue la gota que derramó el vaso en la Procuraduría.
De inmediato, Quintero instauró una narrativa en la que asumió un rol de víctima y señaló que había una persecución política en su contra. Un día después de la destitución, el alcalde hizo un evento masivo en las afueras de La Alpujarra, acompañado de su esposa, Diana Osorio, y su círculo más íntimo. En esa reunión se hizo público el apoyo de Amauri Chamorro, el propagandista de políticos de izquierda de América Latina como Rafael Correa y Nicolás Maduro.
Ese mismo día, el presidente Iván Duque nombró como encargado a Juan Camilo Restrepo, el alto comisionado para la paz. Aunque ese nombramiento se caería después por una decisión judicial, la estadía de Restrepo en el piso 12 estuvo marcada por la hostilidad y los enfrentamientos con el gabinete. Desde el día que llegó a La Alpujarra, Quintero lo tildó de “fantoche” e “usurpador”. Después dijo que era el funcionario más “bobo” del Gobierno Nacional.
Mientras Quintero trinaba con furia, Restrepo tuvo que encarar su primer consejo de Gobierno, el 13 de mayo, donde se encontró a un gabinete cohesionado en torno a la figura de Quintero. Ese día tuvo un encontrón verbal con María Camila Villamizar, la secretaria de Gobierno. Entretanto, el suspendido organizaba un plantón en las afueras de la Procuraduría en Bogotá.
Lo que vino después fue una maraña judicial que terminó en la escogencia de Andree Uribe, postulada por el movimiento Independientes, el 1 de junio. Desde eso, Quintero le bajó a la alevosía de su discurso. Sin embargo, le echó la culpa a Restrepo de haber frenado programas y dijo que ahora tendría que “corregir los errores cometidos”, cosa cuestionable, pues el Gobierno de Restrepo duró apenas 15 días.
Lo cierto es que Quintero vuelve a liderar una ciudad con problemas grandes como el abandono del Centro, la precariedad de la infraestructura educativa y varios retos en movilidad que no han sido resueltos.
Quintero volvió a La Alpujarra sobre las 10:30 de la mañana de este martes 21 junio. En rueda de prensa, acompañado por su gabinete y su círculo íntimo, prometió cinco nuevos metrocables para la ciudad, una propuesta que se ha cuestionado por su viabilidad. Y, contrario a su estilo, habló en un tono conciliador, pidiendo unión entre el empresariado y el sector público.
