Un conductor de aplicación fue raptado en la mañana de este jueves, luego de que tomara un servicio para transportar a cuatro jóvenes en el norte del Valle de Aburrá. En el recorrido, sus pasajeros sacaron armas traumáticas y lo secuestraron.
En medio del recorrido, que comenzó en el barrio Niquía, de Bello, y pasó por el barrio Boston, de Medellín, al conductor del vehículo lo amarraron en sus manos y lo comenzaron a golpear en múltiples oportunidades, ante su resistencia por evitar cualquier accionar delictivo de sus pasajeros.
Un policía, que estaba en vacaciones, se percató de la extraña situación del vehículo y llamó a sus compañeros, por lo que un grupo de cuatro uniformados inició una persecución para dar con la interceptación del vehículo y lograr rescatar a su conductor, con múltiples lesiones.
Los uniformados procedieron con la captura de las cuatro personas que estaban en el automotor, algunas de ellas con sus prendas ensangrentadas producto de los golpes que le propinaron al conductor de esta aplicación, un hombre de 31 años, en el brazo y en la cabeza con el arma traumática.
Los capturados quedaron a disposición de la Policía Metropolitana, mientras se les presentan a las autoridades competentes para iniciarles el proceso por la tortura y el hurto del vehículo de aplicación.
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Las autoridades le incautaron a estas personas un arma tramática, cinco cartuchos y cuatro celulares. Además, se recuperó el teléfono de la víctima y el vehículo que sería hurtado.
Los teléfonos de los detenidos serán revisados para poder determinar si habría alguna vinculación con otros casos similares ocurridos en el Valle de Aburrá, según explicó el comandante del Distrito 6 de la Policía Metropolitana, coronel Pedro Isaza.
“Se presenta una rápida reacción del cuadrante y esto permitió dar con la captura de estas cuatro personas y la liberación de la persona secuestrada”, informaron fuentes judiciales del caso.
Este es el segundo caso de este tipo que se registra en una semana en el norte metropolitano, ya que en la madrugada del pasado viernes un vehículo fue interceptado en el Parque Juanes, en la comuna 5 (Castilla), de Medellín, con otro conductor de aplicación secuestrado.
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Los delincuentes, con el fin de evitar el accionar judicial, arrollaron a dos policías, provocándoles múltiples contusiones que no comprometieron sus vidas. El pronto accionar de otro grupo de uniformados permitió localizar el vehículo, con el conductor fuertemente golpeado, y amarrado con una correa.
Mediante el rastreo de las cámaras de seguridad se hizo una persecución a dos hombres que se bajaron del automotor, quienes fueron capturados en la misma zona donde se registraron los hechos.
Según explicó sobre este hecho el comandante operativo de la Policía Metropolitana, coronel Eddy Javier Sánchez, este hecho se registró porque los capturados pretendían hurtarle el vehículo y sus pertenencias al conductor del automotor.
De acuerdo con los registros de la Gobernación de Antioquia, el año pasado se registraron nueve casos de secuestro, en su mayoría en la modalidad exprés, de los cuales seis se registraron en Medellín, dos en Ituango y el restante en Cisneros.
