Un muro que se cayó, el cauce que se desbordó y la casa que no soportó, son algunas de las historias escuchadas ayer en varios puntos del Valle de Aburrá cuando entre lodo y basura, los afectados por las lluvias del domingo intentaban rescatar parte de sus enseres.
Aunque los aguaceros se registraron en toda la región metropolitana, se sintieron con más fuerza en los barrios El Pesebre, comuna 13; Belalcázar, comuna 5 y el corregimiento de San Cristóbal.
Camilo Zapata, director del Dagrd -Departamento de Gestión y Atención del Riesgo- indicó que no hubo lesionados ni víctimas fatales y señaló que durante la emergencia recibieron cerca de 400 reportes en el 123.
Al cierre de esta edición, Zapata entregó un balance de 121 evacuaciones: 103 definitivas y 18 temporales.
En El Pesebre, personal de la Secretaría de Inclusión Social atendió 115 personas de 44 familias; mientras que en el barrio Belalcázar, donde se evacuaron 29 viviendas y dos quedaron destruidas, atendieron a 68 personas afectadas.
Por otra parte, en Copacabana, la administración municipal entregó un registro 632 personas afectadas y 197 familias con pérdida total de enseres, tras el desbordamiento del río Aburrá (Medellín). Los barrios La Pradera, La Asunción y Guadalajara, fueron los más afectados por las inundaciones.
Las quebradas, el riesgo
En dos de los tres casos registrados, el desbordamiento de las quebradas La Iguaná -centroccidente- y La Tinajita - noroccidente-, causaron estragos e inundaciones.
Según los testigos, estas se taponaron y cuando el agua subió, trajo consigo gran cantidad de basura y material vegetal y rocas.
Al respecto, Sergio Orozco, secretario de Medio Ambiente de Medellín, advirtió que sí se siguen invadiendo las zonas de retiro de las quebradas o arrojando basuras a ellas, es posible que se presenten más emergencias.
Según el funcionario, su dependencia ha atendido 310 puntos críticos de las quebradas de la ciudad, entre los que se encuentran las mencionadas. Precisamente, el pasado 30 de septiembre culminó, sin pormenores, la intervención de La Tinajita, en un sector aledaño al afectado.
“En este caso, donde el cauce sí está bien mantenido, las crecientes se dieron porque se superó la capacidad hídrica, pues llovió mucho en poco tiempo”, añadió Orozco.
El funcionario también explicó que, según el registro de precipitaciones obtenido del domingo pasado, La Iguaná, por ejemplo, recibió la mayor descarga de lluvias a lo largo de su cauce.
“Esta última semana de noviembre es el cierre de la época de transición de periodo lluvioso a seco y es por ello que las precipitaciones se intensifican”, dijo el secretario.
Zapata, por su parte, añadió que estas lluvias podrían irse hasta la primera semana de diciembre.
Finalmente, el director reiteró las recomendaciones a los ciudadanos cuando se presenten estas contingencias: “lo primero es prevenir y preservar las vidas al buscar sitios seguros, así como informar en las líneas de emergencia cualquier situación” .
La iguaná inundó dos barrios y destruyó nueve casas
La quebrada que cada ocho o diez años crece con furia, volvió a hacer de las suyas en al menos tres partes de su cauce. La Iguaná inundó vías y casas en el barrio que lleva su mismo nombre, en el corregimiento San Cristóbal y, con mayor gravedad, en el barrio El Pesebre. En este, según la Alcaldía de Medellín, nueve casas fueron arrasadas y otras 30, que quedaron en riesgo de colapso, debieron ser evacuadas. Sin embargo, Orlando Suaza, líder comunal de El Pesebre, mencionó que las viviendas destruidas son en total 12 y 300 personas las afectadas. Fue cerca de las 6:00 p.m. del domingo cuando el agua comenzó a subir inundando primero las aceras y pasando el nivel de puentes peatonales hasta que entró a unas casas y terminó por destruirlas. Gracias al apoyo de la comunidad, todos los afectados lograron salir. Unos se trasladaron a casas de vecinos y familiares, mientras que otros fueron acogidos en albergues de la alcaldía.
El río dañó la noche en cuatro sectores de copacabana
No había oscurecido aún cuando el agua del río Aburrá (Medellín) ya había ingresado a las calles de los barrios La Asunción, Guadalajara, La Pradera y Machado, en Copacabana. Lo hizo superando su nivel normal y derrumbando un muro de contención que, según los residentes de La Asunción, habían reportado a las autoridades, pues estaba deteriorado. Carolina Ramírez, una de las afectadas, recordó los angustiosos momentos en que fue rescatada, junto con su hijo de brazos, por los bomberos pues había quedado atrapada en su casa. Ayer el asfalto de las calles no se veía por la cubierta de lodo y basuras, elementos que retiraron de a poco con ayuda de maquinaria y el batallón de Ingenieros. El Municipio declaró la calamidad pública.
El agua atravesó la autopista norte y arrasó dos viviendas
La creciente de las quebradas La Tinajita y La Moreno, comuna 5, sorprendió a los residentes de Belalcázar y Girardot, quienes contaron que hace 30 años no pasaba algo así. Aceras dañadas y escombros que bloquearon la vía hicieron parte de la escena que se vio el lunes en la mañana. Alexánder Castañeda relató que el agua arrastró su camión hasta la casa del vecino, mientras que Jhon Villegas llegó en medio del torrencial para auxiliar a sus padres, quienes habían quedado atrapados luego de que el muro de su casa colapsara ante la presión del agua e incluso atravesara hasta la cuadra contraria.
