“La paz no puede ser una bandera que se utiliza solo en función de los intereses morbosos y aberrantes de tanto político y sus aliados en los medios de comunicación”, agregaron.
Y es que Rendón ha sido uno de los opositores más visibles y vehementes de las conversaciones que el gobierno nacional adelanta con grupos al margen de la ley como el ELN, el Clan del Golfo y las disidencias de las Farc. Por ejemplo, a pesar de estar invitado, no asistió a un encuentro el pasado mes de junio entre representantes del gobierno nacional y las disidencias de las Farc en Yarumal, norte de Antioquia, una de las zonas donde más sangre se ha derramado en el departamento en lo corrido de este año.
“Estos criminales no han dado muestras de paz”, fue el argumento que dio en ese momento para no presentarse al encuentro.
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Una posición que ha sido aplaudida por muchos, quienes consideran que la actitud del gobierno nacional ha sido permisiva con este grupo, pero criticada por otros, quienes creen que desde su posición como gobernador poco ayuda a la pacificación del territorio yéndose en contra del gobierno nacional.
Y es que en lo que va de este año, 944 personas han sido asesinadas en el departamento, lo que representa una disminución del 8% si se compara con los 1.026 homicidios que iban para la misma fecha en el 2023. No obstante, hay municipios y subregiones que han sufrido una tremenda escalada de violencia este 2024, como lo es la región del Nordeste, por ejemplo, donde los homicidios han aumentado en un 70% y en el Bajo Cauca, un 57%. En municipios como Amalfi, Sonson y Yarumal, los homicidios se han multiplicado por dos y hasta por tres.
Respecto al señalamiento en el panfleto, el gobernador Andrés Julián Rendón respondió que no lo inquietan los que digan “esos bandidos”. Agregó que su trabajo era de estar del lado de los “antioqueños trabajadores y no de los enemigos del departamento y del país”.
“Lo que sí me cuestiona es el trato generoso con rosas, con zanahoria, que le sigue dando el gobierno nacional a muchas estructuras criminales que posan de insurgentes o de contrainsurgentes”, agregó.
Según dijo, actualmente en el departamento, a raíz de la política de Paz Total, “no se puede tocar a ningún bandido, ni del ELN, ni del EMC, ahora menos del Clan del Golfo”.
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Y finalizó señalando al gobierno nacional de darles a estos grupos “un camino de rosas” mientras que a los ciudadanos, azotados por el reclutamiento, la extorsión, el desplazamiento, los homicidios y el microtráfico, les tocaban las espinas.
“Tan solo hay que ir a algunos pueblos de Antioquia, al Nordeste, al Bajo Cauca y otras subregiones y preguntarle a los comerciantes si ellos caminan por rosas como lo hacen los bandidos o si tienen un camino empinado y lleno de espinas por cuenta de la extorsión. Los amigos míos son los antioqueños luchadores y los enemigos son todos los que violentan y amedrentan a mis paisanos”, concluyó el gobernador Andrés Julián Rendón en un video que compartió a través de sus redes sociales.
En otros apartados del panfleto en cuestión, el Clan del Golfo resaltó que con la posesión de Gustavo Petro como presidente el 7 de agosto del 2022, ellos como grupo armado manifestaron su voluntad de participar en el proceso de la paz total y que, como muestra de buena voluntad decretaron un cese al fuego de operaciones ofensivas que, dicen ellos, se ha mantenido. Esto a pesar de que en el caso de Antioquia, por ejemplo, las autoridades señalan a miembros de esta organización de estar detrás de buena parte de los homicidios que se cometen a diario en el departamento.
