El cierre de operaciones de la aerolínea ADA dejó sin vuelos a los habitantes de Caucasia por partida doble: además de que la empresa era la única que llegaba hasta el Bajo Cauca, también es la propietaria del aeropuerto local, llamado Juan H. White.
“Estamos muy afectados. En la economía local se ha sentido el cierre porque muchos ganaderos y comerciantes se movían por el aeropuerto. Ahora toca ir casi tres horas por tierra hasta Montería o casi siete en carro desde Medellín”, explicó el alcalde de Caucasia Óscar Aníbal Suárez.
El 29 de marzo, ADA apagó sus motores por problemas financieros. Hasta ese día, la aerolínea volaba tres veces al día a Caucasia, entre lunes y sábado; y los domingos iba una vez al día. Mensualmente, según datos oficiales de la empresa, se movilizaban unos 3.000 pasajeros.
Hoy la pista está desocupada y las luces permanecen apagadas. Andrés Betancur, gerente de ADA, aseguró que en la terminal aérea aún están algunos empleados que atienden a los clientes que tenían pasajes comprados.
“También hay alguien encargado de las comunicaciones por si aterriza alguna aeronave, pues por ahora la pista quedó habilitada únicamente para operaciones de la Policía o entes gubernamentales”, dijo Betancur. Aclaró que ADA les notificó a las autoridades civiles y militares que podían llegar a la terminal aérea, pero “bajo su propio riesgo”.
Betancur contó que la empresa compró el lote y el aeropuerto en 2008. “No se cuál fue el monto que se pagó pero en ese momento convertimos la licencia para operación privada”, dijo.
En 2017, la Aerocivil emitió una resolución que cambió el uso del aeropuerto de privado a público, lo que en teoría permitiría la llegada de otras aerolíneas, cosa que no sucedió.